Trump respondió a las advertencias de los líderes europeos de que su decisión de imponer aranceles a las importaciones de acero y aluminio provocarían represalias de numerosos socios comerciales de Estados Unidos.
No conforme con despertar enojo por su anuncio de aplicar aranceles a la importación de acero y aluminio, y con ello iniciar de facto una guerra comercial, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó ayer con perjudicar a las compañías automotrices de la Unión Europea (UE) con fuertes aranceles.
En una serie de mensajes en Twitter, mientras estaba en su resort Mar-a Lago, en Florida, Trump respondió a las advertencias de los líderes europeos de que su decisión de imponer aranceles a las importaciones de acero y aluminio provocarían represalias de numerosos socios comerciales de Estados Unidos.
"Si la UE quiere aumentar más sus aranceles y barreras ya de por sí masivas a las empresas estadounidenses que hacen negocios allí, simplemente aplicaremos un impuesto sobre sus automóviles que ingresen libremente en Estados Unidos.¡Gran desequilibrio comercial!", escribió.
Estados Unidos impone un arancel de 2.5 por ciento a la importación de automóviles extranjeros y un arancel del 25 por ciento sobre la importación de camiones y furgonetas comerciales extranjeras. La Unión Europea cobra un arancel del 10 por ciento sobre la importación de automóviles.