Por qué y por quién votar
En una democracia, la forma de elegir a nuestros representantes y quienes nos van a gobernar, es mediante elecciones en las cuales ejercemos nuestros derechos por medio de emitir un voto.
En México y con seguridad en otros países, tristemente sucede que del padrón electoral, muchos se abstienen de votar y se da el caso, con frecuencia que fueron mas los que se abstuvieron de votar que los que lo hicieron, sin embargo el cargo o el puesto para el que se hizo la votación no queda vacante, sino el que obtuvo mayoría de los que si lo hicieron.
Considero como obligación el votar cuando nos toque hacerlo, ya que después no tendremos derecho a quejarnos del que fue electo y es tarde para remediar nuestro actuar al no ir a las urnas.
Debo aclarar que aunque en un tiempo tuve simpatía por algún partido, no estoy afiliado a ningún partido, y me decepciona y preocupa la cantidad exagerada de partidos y partiditos que hay en México, aunque se podría decir que son cuatro los que tienen mas adeptos y seguidores: Morena, PAN, PRD, y PRI, por orden alfabético y con posibilidades de ganar alguna elección. Los demás son comparsas o negocios de unos cuantos y que buscan alianzas para sobrevivir.
Es mi opinión que no se debía gastar tanto dinero de los contribuyentes y los partidos deberían mantenerse de aportaciones particulares de sus asociados o partidarios, pero eso es harina de otro costal. Es una obligación de todo buen ciudadano, enterarse de los candidatos y averiguar en la medida de lo posible sus antecedentes y votar mas basado en la persona, aunque se puede tener preferencias por la ideología de algún partido, y luego asistir a votar.
Espero que la próxima elección para presidente de la República, el numero de votantes supere al abstencionismo y también que se presenten cada vez mejores candidatos.
Si no votamos, no nos quejemos.
Raymundo Portilla
Torreon Coahuila
Ciudad sucia y abandonada
Que bueno que termina la gestión administrativa del PRI, en la presidencia de nuestro querido Torreón, un gobierno de Olmos y de Riquelme, que se olvido por completo de la imagen de la ciudad, dejan una ciudad triste y abandonada, una ciudad llena de pozos y hoyancos, que gracias a la mala calidad de los materiales que utilizan para repavimentar, les ayudó las precipitaciones pluviales que se presentaron y que hicieron del pavimento un total desastre en muchas de nuestras calles, boulevares y cruceros llenos de tierra, y de basura.
Pintura vial donde nada mas se ven los restos de ella, un periférico que debería de ser la carta de presentación para nuestros visitantes luce con puentes elevados llenos de tierra, y basura, asi como de un pavimento deprimente; una reforestación en avenida Juárez y Alameda de mezquites y dejando como monumentos a la posteridad los troncos de palmas que vivieron mas de 60 años como mudos testigos de la historia de nuestra ciudad.
Ojalá que las nuevas autoridades vuelvan a darle a nuestra ciudad aquel mote de que era una de las ciudades mas limpias del país, y que era considerada la Perla de la Laguna.
José Guillermo Hernández González
Torreón, Coah.
