Daños. Las deficiencias constantes de esta obra hacen cuestionar la legalidad de los procedimientos para su construcción. (EL SIGLO DE TORREÓN)
La mala calidad de la supercarretera Durango-Mazatlán podría derivar en una auditoría total, que abarque desde el inicio de su construcción hasta el mantenimiento actual.
Esto luego de que en la sesión de la Comisión Permanente del Congreso del Estado se presentó un punto de acuerdo para realizar esta investigación, que debería ser encabezada por la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
En el punto de acuerdo se planteó exhortar a la Cámara de Diputados para que, a través de la ASF, realice una "auditoría extensiva que permita deslindar responsabilidades a empresas y servidores públicos en la construcción y mantenimiento de la autopista Durango-Mazatlán en caso de mal manejo de las licitaciones, incumplimiento de los contratos y/o errores en la inspección de la referida obra carretera de su inicio en 2001 hasta los mantenimientos carreteros que a la fecha siguen efectuándose".