Leche. Destaca el Frente Lechero Nacional afectaciones al sector lechero social, principalmente a los lecheros de traspatio. (EL SIGLO DE TORREÓN)
El Frente Nacional de Productores y Consumidores de Leche considera que el mercado nacional para este alimento es incierto y que por lo menos 150 mil familias podrían abandonar la actividad en 2018.
Señalan que se importaron 130 mil toneladas de queso, equivalentes a 1 mil 300 millones de litros y denuncian que los industriales, comerciantes y Liconsa, prefieren lo extranjero y acaban con la producción nacional
El representante del frente en La Laguna y Secretario de Finanzas a nivel nacional, Conrado Antúnez Ponce, señaló que la producción de leche en México, muestra una tendencia permanente a la baja, a partir de la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en 1994.
Agregó que en 23 años de vigencia comercial con EU y Canadá, la dependencia alimentaria en este producto es de más de la tercera parte -alrededor de 6 mil millones de litros anuales-mientras que alrededor de 600 mil pequeñas unidades productivas mexicanas, han desaparecido.
Por lo anterior consideró que hay desánimo de 150 mil pequeños y medianos productores, sobrevivientes de una industria rural forjada con mucho esfuerzo y trabajo por varias generaciones, incomprendida por el gobierno federal y de los estados, abandonada a su suerte, con apoyos a cuenta gotas, sólo para alargar su agonía, dijo el dirigente del Frente Nacional.
Antúnez Ponce dijo que para los pequeños y medianos productores de leche del país, el 2017 fue negativo para su economía.
Señaló que, por falta de recursos económicos, los pequeños productores han tenido que vender sus vacas a los rastros, hecho que ha impactado, al cierre de este año, en la quiebra de 4 mil 500 establos y disminución del número de vacas en el resto. Esto propicia la destrucción de la estructura económica y de la capacidad operativa.