Por un lado, la Sub-20 y Sub-17 se coronan en el mismo torneo por segunda vez en la historia (repiten el logro de 2015); por otro, en el primer equipo no abundan los jóvenes canteranos... al menos no entre los once titulares. ¿Qué pasa?
La excusa/explicación a la que estamos acostumbrados es el proceso de adaptación a la máxima categoría de los jóvenes y, sobre todo, la urgencia de resultados que se exigen en el primer equipo (al estar latente el riesgo del descenso).
Pero desde hace dos años a la fecha, ¿en qué ha beneficiado este óptimo desempeño de los jóvenes santistas "hechos" en casa? En pocas palabras, ¿de qué sirve que en las Básicas se logren títulos si en el primer equipo, el que vale millones de dólares, no pasa nada? ¿Sólo para presumir?
Por otro lado, no son pocas las historias de juveniles que pierden el piso y con ello sus carreras. Que prefieren la fiesta y los autos veloces. Incluso, hay quienes debutan y jamás vuelven a figurar, aunque hayan tenido un buen desempeño.
No se puede decir que les falte atención. Al contrario, el presidente del Santos se cansa de mostrar las bondades que tiene el club hacia sus jugadores en formación: instalaciones, departamento de nutrición, preparación física, entrenadores hasta en la parte moral. ¿Falta un sicólogo que dé resultados óptimos en el comportamiento inmediato de las promesas santistas?
Tampoco son pocas las historias que se escuchan alrededor del club sobre la preferencia que tienen algunos jugadores por encima de otros, por tener mejores relaciones dentro de la institución.
Como sea, Santos debe aprovechar ese éxito en sus inferiores en el primer equipo. De alguna forma. Quizá el que esté Siboldi con los "grandes" sea el primer paso.
Otro punto y aparte sería traer refuerzos que sí ayuden a la causa y que el departamento de Inteligencia Deportiva sea realmente inteligente.
¡Felicidades a los jóvenes campeones! Que disfruten del éxito, que sigan trabajando y que no se desgasten en festejos desmedidos, que la vida apenas comienza y lo mejor siempre está por llegar.
Síganmen los buenos... y las buenas también: @Foko_54.
