Las personas creen que si las mujeres son brujas, sus hijas también. (INTERNET)
En Papúa Nueva Guinea se ha reportado el caso de una niña de seis años que fue torturada con cuchillos calientes acusada de practicar brujería.
La madre de la menor ya había sido quemada viva hace algunos años, acusada también de brujería.
La niña, quien ahora se encuentra en un hospital, fue herida numerosas veces por un grupo de personas que la torturaron cruelmente hasta que algunos miembros de la comunidad intervinieron y lograron rescatar a la pequeña.
El misionero luterano Anton Lutz relató a la cadena ‘ABC’ que ésta es la primera vez que ve que una menor sea sometida a torturas por brujería.
“Parte de la leyenda urbana del sanguma (practicar brujería), que dice que las mujeres son brujas, incluye la creencia de que esto puede pasar de madre a hija", comenta Lutz en relación al motivo por el que los residentes de la localidad se volcaron contra la menor. “Creían que [la niña] era responsable de todo lo malo que sucedía en el pueblo", añade.
