Los huracanes en el océano Pacífico dependen de la temperatura en el ambiente y en el agua de mar. Ya empezaron los frentes fríos a aparecer en el país y comienzan las corrientes costeras de agua fría del norte. Cuando esto ocurre, los huracanes no se desarrollan o se desvían hacia el oeste en el interior del océano.
No hay una fecha precisa de inicio y terminación de la temporada de huracanes que va de junio a octubre, aun cuando se han presentado ocasionalmente ciclones fuera de temporada. Por lo tanto, lo más probable es que ya no se presente algún huracán que aporte lluvias a las cuencas de los ríos Nazas y Aguanaval.
Es importante destacar que existe la posibilidad de que los frentes fríos choquen con las corrientes de aire marítimo y produzcan lluvias en las cuencas, pero su cuantía es mucho menor que la de los huracanes.
De acuerdo a lo avanzado del año, se puede aseverar que en este momento no existe un riesgo con el almacenamiento actual de 2,918 millones de metros cúbicos (Mm3) en la presa Lázaro Cárdenas, mejor conocida como El Palmito, ya que, aunque su nivel está muy cercano al 100% determinado por el Nivel de Aguas Máximas Ordinarias (NAMO) en 2,958 Mm3, la presa todavía tiene capacidad para regular avenidas hasta llegar el agua a 1.0 m abajo de la parte superior de las compuertas del vertedor de demasías con un volumen de 3,336 millones de metros cúbicos (Mm3) y a 3.18 m por arriba del NAMO actual.
Es obvio que el personal de CONAGUA está monitoreando las condiciones climatológicas y meteorológicas en el océano Pacífico y tiene establecida una probabilidad de ocurrencia en estas fechas de un huracán, por lo que la autoridad debe estar analizando la situación para tomar una decisión sobre continuar manteniendo el agua almacenada en la presa o desfogar los volúmenes excedentes.
Cabe aclarar que para alcanzar el Nivel de Aguas Máximas Extraordinarias (NAME) le faltaría ascender al agua 12.0 m más hasta llegar a un volumen de 4,278 Mm3, lo cual no es deseable, aunque sí factible en un caso extraordinario.
El propósito principal de la presa El Palmito es almacenar agua para el riego agrícola y controlar las avenidas extraordinarias en el río Nazas y una vez que sube el nivel del agua, el control de las avenidas se realiza a través de las compuertas radiales del vertedor de demasías.
