L a misión encargada a Siboldi y su cuerpo técnico es tan difícil como intentar convencer a López Obrador de que llame por su nombre a la señora de Calderón. Sacar a un equipo de zona comprometedora y aspirar todavía a una utópica calificación. Platicando con el técnico charrúa nos comentó que no le extraña la situación, nos comentó que a donde ha llegado en su carrera futbolística siempre ha sido contra todos los pronósticos. Como jugador cuando llegó por primera vez a México traído por el Atlas de Guadalajara, venía de Gimnasia y Esgrima La Plata de la Liga Argentina donde se la pasó en la banca, llegó a nuestro país donde simplemente la rompió, a tal grado que sus convocatorias a la Selección Uruguaya fueron gracias a sus actuaciones en México. Robert Dante fue uno de los pocos arqueros con una estupenda pegada en su pierna izquierda, sus despejes eran auténticos pases, le pegaba prácticamente de volea y creaba líneas tendidas que llegaban a sus compañeros quienes tenían que tener la técnica necesaria para parar debidamente un balón que venía a gran velocidad y desde 60 metros de distancia. Tenía tan buena pegada el charrúa que incluso en los cuartos de final de la Copa América de Ecuador 1993, pateó un penal en la serie definitoria contra Colombia, Siboldi fue el tercer tirador, acertó, pero su compañero Eber Moas exRayado de Monterrey erró y fueron eliminados por Colombia de Valderrama, Asprilla, Valencia, Córdoba y compañía. Esa Copa ha sido lo último que ha ganado a nivel mayor Argentina, quien derrotó en la final al mejor seleccionado mexicano de todos los tiempos. En 1996 Robert dio un ejemplo de su nivel de compromiso con la playera que defendía, al descender Tigres, Robert Dante decidió continuar con los felinos y así ayudarlos a retornar en un año al máximo circuito. Ahora es la gran oportunidad de tratar de establecerse como un director técnico de primera, tiene la promesa de concluir el torneo y luego Dios dirá, claro démosle su verdadero valor a una promesa de directivos del futbol mexicano, le acababan de dar el espaldarazo a Chepo y al día siguiente ahí te ves. Siboldi comenta que no le incomoda encarar retos, los enfrenta con buen ánimo y confianza, actitud que trata de transmitir a sus jugadores, sabe que el reto actual, con un equipo que se cansó de fabricar múltiples opciones de gol sin meterla y ahora se quedó sin ideas a no llegar y mucho menos meterla, un equipo que simplemente no sabe ganar, el reto a vencer es colosal. Este equipo de Santos Laguna lo dejó hecho un nudo José Manuel de la Torre, mentalmente están bloqueados y no encuentran el gol, dejaron ir en casa dos partidos presupuestados para ganarlos, Veracruz (derrota 2-3) y Puebla, infame empate a cero, éste último ya dirigido por Robert Dante. Si en algo coinciden el director técnico y presidente del equipo es en que existe material como para estar acechando puestos de calificación y no de descenso, es cierto, el plantel de Santos Laguna no le pide nada en el papel a equipos como Monarcas, Necaxa y León que se encuentran en zona de calificación, el asunto es pasar del papel a la cancha y es ahí donde los laguneros se meten al mismo costal de los que luchan por no descender, Santos forma parte de los “Desperate Six” junto a La Franja, Lobos, Gallos, Tiburones y Zorros. De Siboldi dependerá encontrar la punta de la madeja y deshacer el nudo que inutiliza e inhibe el gol a la ofensiva guerrera, es lugar quince de la tabla de goleo colectivo, con diez goles en diez encuentros, reaparece Furch esta tarde ante el equipo que trajo al entrenador del Santos a México, el Atlas de Guadalajara otro involucrado en el brete del descenso, Furch tiene cinco goles y es lo más viable para encontrar el gol esta tarde, es otro juego “presupuestado” para ganar, aunque Atlas tiene ocho seguidos sin perder contra Santos y en Torreón en los últimos cinco partidos ha empatado dos y ganado tres. Toda la suerte y buena vibra para este cuerpo técnico integrado por los dos gentiles charrúas: Siboldi y Cigliuti y dos laguneros doblemente guerreros: Figueroa y Rodríguez.
