Conflicto. El presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker. La Comisión rechaza mediar el conflicto. (EFE)
Cataluña es ya un asunto eminentemente europeo, según el presidente catalán Carles Puigdemont. Bruselas, a pesar de las portadas en la prensa internacional, sigue negándolo: es un asunto interno.
El president Carles Puigdemont pidió ayer martes a Europa que "se implique a fondo" en la búsqueda de una solución dialogada. Pero Bruselas no lo ve claro.
La Comisión y el resto de instituciones rechazan mediar: sólo accederían si lo solicita el Gobierno español, según las fuentes consultadas. Y Rajoy ha expresado con claridad que se opone frontalmente a una mediación internacional.
Eso condena a Bruselas a repetir el guión de las últimas semanas, y deja en manos de Rajoy cualquier posible solución. "Es un asunto interno"; "pregunte al Gobierno español y al Gobierno catalán". Esas son las dos respuestas más repetidas en Bruselas en los últimos tiempos sobre el desafío independentista catalán, y seguirán siéndolo en los próximos días.
Las instituciones comunitarias se han puesto de perfil durante varias semanas y han repetido el sintagma "asunto interno" hasta convertirlo en un mantra, a pesar de la inquietud creciente respecto a una posible declaración unilateral de independencia.
Postura
El presidente francés Emmanuel Macron, subrayó ayer que ni Francia ni la UE deben mediar en el conflicto catalán.
⇒ Dijo que se trata de un asunto interno de España.
⇒ Otros países no deben involucrarse.