En la alberca del Tecnológico de Monterrey, Campus Laguna, el destacado tritón lagunero ha compartido sus secretos, hábitos y experiencias como deportista, con niños y jóvenes nadadores de la región. (Especial)
Con la firme intención de lograr su sueño olímpico y acudir como parte de la delegación mexicana a los Juegos de Tokio 2020, el nadador lagunero Miguel de Lara sigue preparándose a conciencia y brindando lo mejor de sí.
ALTO RENDIMIENTO
Miguel de Lara Ojeda entrena desde hace poco menos de un año en la Universidad de Auburn, en Alabama, Estados Unidos, donde se prepara con entrenadores y atletas de alto rendimiento, al tiempo que realiza sus estudios de ingeniería de software en la Universidad Autónoma de Chihuahua, en la modalidad "on line" o en línea. Sin embargo, se ha dado tiempo para visitar a su familia en Torreón y de paso ofrecer una serie de clínicas a nadadores laguneros, en las que les comparte sus experiencias, hábitos y recomendaciones que le han llevado a ser un deportista internacional.
Desde hace un par de semanas, Miguel está realizando estas clínicas con el apoyo del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), Campus Laguna, que le facilita la alberca de sus instalaciones para recibir a 30 niños y jóvenes en cada sesión. Será el próximo fin de semana, del 26 y 27 de agosto, cuando culminen las clínicas, de las que continúan abiertas las inscripciones, aunque ya quedan menos de la mitad de los lugares disponibles, ya que los deportistas laguneros han respondido de gran manera ante la atención personalizada y los valiosos consejos que les comparten.
PARA ENTRENAR EN USA
La realización de estas clínicas tiene como objetivo para Miguel el poder recabar fondos para solventar su estancia en los Estados Unidos, ya que no recibe becas municipales ni gubernamentales, aunque cuenta con un patrocinio, pero le siguen haciendo falta recursos para mantenerse entrenando en esas latitudes. "Estoy patrocinado por Nelson Vargas Family Fitness que me está apoyando con competencias y viajes, también tengo "un ángel" que me está ayudando económicamente para poder mantenerme allá, además de estas clínicas con lo que obtengo recurso para seguir entrenando", dijo.
Miguel aceptó el patrocinio debido a lo atractivo que luce para su carrera deportiva, aunque tuvo que dejar al municipio de Torreón y el estado de Coahuila, lo que afirma "le dolió mucho", aunque está convencido de que lo hizo para mejorar. "Acabo de llegar del mundial de Budapest, fue una buena experiencia, obviamente mi tirada son los Juegos Olímpicos de Tokio".
Por buen camino
Miguel va paso a paso rumbo a cumplir su sueño de Juegos Olímpicos.
→ Participó apenas el mes pasado en el mundial de la FINA.
→ Esa competencia en Budapest fue su primer mundial.
→ Aspira a estar en las finales de 100 y 200 metros libres en los Olímpicos de 2020.
