Una familia que vive en Richmond, en el estado de Virginia, Estados Unidos, se topó con una escalofriante escena al regresar a casa: las paredes y piso de su casa estaban llenos de sangre.
Desde que entraron presintieron algo extraño, porque su perro les ladró insistentemente en lugar de recibirlos como de costumbre. Entonces, siguieron a su mascota y se encontraron con rastros de sangre, que iban desde las escaleras hasta la planta superior de la casa, según lo cuenta Tristan James Murrin, uno de los miembros de esta familia, al canal de televisión ‘KTLA’.
Un ladrón había entrado a al inmueble a robar y la mascota de la familia, un perro pastor alemán de nombre Oden, había defendido la casa y atacado al intruso. "Creo que hizo su trabajo. Sabía que ningún desconocido debía estar en casa cuando nosotros no estábamos allí", declara Tristan sobre lo que pasó.
Su mascota los recibió de forma inusual, lo que fue el foco rojo que les dijo que algo estaba mal. (YOUTUBE)
