La pareja tiene un año desaparecida desde su visita a la Ciudad de México. (EL UNIVERSAL)
A más de un año de su desaparición, familiares de una pareja originaria de Cadereyta, Nuevo León, que desapareció cuando realizaba un viaje en la Ciudad de México, siguen pidiendo ayuda para dar con su paradero.
En casa, dos hijos los esperan.
Autoridades han pedido a los seres queridos de los desaparecidos no hacer públicos de nuevo sus nombres, debido a las investigaciones.
Cabe destacar que tampoco hay rastro de la camioneta Ford roja en la que se trasladaban.
El último rastro que se tiene de ellos es una fotografía en la que la mujer muerde un taco en un establecimiento, aparentemente ubicado en la carretera libre México-Cuernavaca, a la altura de Topilejo, en la delegación Tlalpan, puede leerse en un texto de la periodista Lydiette Carrión, publicado en El Gráfico.
La madrugada del sábado 2 de julio de 2016, ella, de 46 años y dedicada al hogar, y él, de 49 años, jubilado de Pemex, salieron de su natal Cadereyta, Nuevo León. Su intención era pasar el fin de semana en la capital.
"Viajaron en auto las casi 12 horas, y llegaron. Se sabe que pasaron una noche en aquella ciudad", escribió Lydiette Carrión.
De acuerdo con información de El Gráfico, al día siguiente, 3 de julio, alrededor de la una de la tarde, a través de Whatsapp la pareja se comunicó con la familia:
"La mujer envió una fotografía de ellos en el lugar. Y a su hermana le escribió 'te marco en un ratito'".
La hermana nunca recibió la llamada...
Quien sí recibió una llamada fue la hija del matrimonio. Su mamá le pidió buscar vuelos de regreso a Cadereyta para el lunes. Así lo hizo la hija, pero cuando marcó a la ahora desaparecida para darle indicaciones de los viajes disponibles, su madre ya no contestó.
Ese mismo día, otros familiares intentaron comunicarse con el matrimonio sin éxito. El lunes 4, la hija intentó comunicarse con sus padres de nuevo. No lo consiguió. El martes 5, la familia ya estaba viajando al área de la Ciudad de México para buscarlos.
"No tenían idea de por dónde empezar. Ni siquiera sabían el nombre del restaurante desde el cual se comunicaron por última vez", reza el trabajo periodístico de El Gráfico.
La familia difundió la imagen en la que la mujer desaparecida muerde el taco. Personas que vieron el post en Facebook trataron de identificar el lugar; algunos decían que era el mercado de Coyoacán, otros que era un establecimiento ubicado en las inmediaciones del Desierto de Los Leones, pero al final "hubo quien acertó: un restaurancito por Topilejo".
Gracias a la pista, familiares pudieron reconstruir los últimos pasos de la pareja.
A más de un año, no hay pistas abiertas.
"La familia ha peinado las morgues de Cuernavaca y la Ciudad de México. Sólo queda volver a hacerlo", dijo Carrión.
En el texto de El Gráfico se asegura que al inicio, "autoridades locales de la Ciudad de México trataron mal a los familiares".
El caso fue tomado por la Procuraduría General de la República (PGR).
"Un mes nos dicen algo, y al siguiente lo mismo. Quisiéramos tener alguna respuesta, pues lo que ya quisiera es encontrarlos", declaró la hermana de una de las víctimas.
