Aunque el gasto en salud, educación, desarrollo social y desarrollo rural es definido como prioritario en los proyectos presupuestales de cada año, a la hora del ejercicio de los recursos son relegados por otros rubros. (ARCHIVO)
Los recursos destinados al desarrollo social han resultado insuficientes para abatir la pobreza en el país, y a pesar de ello no se ejercen completamente.
Un análisis del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) de la Cámara de Diputados indica que, aunque el gasto en salud, educación, desarrollo social y desarrollo rural es definido como prioritario en los proyectos presupuestales de cada año, a la hora del ejercicio de los recursos son relegados por otros rubros.
En 2016, detalla, el gasto del Gobierno federal superó en 12.9 por ciento el presupuesto aprobado por el Congreso, a pesar de los ajustes preventivos efectuados en el transcurso del ejercicio fiscal.
Sin embargo, la mayor parte del sobreejercicio correspondió a ramos como Energía, Presidencia y Función Pública.
En tanto, en los ramos de salud, desarrollo social y agricultura se dejaron sin ejercer 16 mil 272 millones de pesos, monto equivalente al presupuesto anual de la PGR.
Entre los programas con mayor subejercicio se encuentran el Seguro Popular, Próspera, Pensión para Adultos Mayores y Comedores Comunitarios.