Le prohíbe al presidente Donald Trump retirar las penalizaciones sin obtener primero autorización del Congreso. (ARCHIVO)
Ansiosa de castigar a Rusia por interferir en las elecciones presidenciales de 2016, la Cámara de Representantes aprobó ayer martes un nuevo paquete de sanciones económicas contra Moscú que además le prohíbe al presidente Donald Trump retirar las penalizaciones sin obtener primero autorización del Congreso.
Los legisladores aprobaron la propuesta con una abrumadora votación de 419 a favor y 3 en contra, con lo que se abre paso hacia el Senado. Si los senadores actúan rápidamente, la propuesta de ley podría estar lista para ser firmada por Trump antes de que el Congreso entre a su receso de agosto.
Se prevé que el Senado, al igual que la Cámara de Representantes, apruebe la medida por un margen tan amplio que el presidente no pueda vetarla. La propuesta también incluye sanciones contra Irán y Corea del Norte.
La medida de 184 páginas funge como una reprimenda a las agresiones militares del Kremlin en Ucrania y Siria, en donde el presidente ruso Vladimir Putin ha respaldado al mandatario Bashar Al Asad. Tiene como objetivo sancionar a Putin a y los oligarcas cercanos al mandatario al enfocarse en la corrupción rusa, las violaciones a los derechos humanos y sectores vitales de la economía rusa, incluida la venta de armas y las exportaciones energéticas.
"Ya era hora de que respondiéramos con fuerza", dijo el republicano Ed Royce, representante de California y presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara baja.
"La retórica (de Trump) hacia los rusos ha sido demasiado complaciente y conciliadora hasta este momento", dijo el representante republicano Charlie Dent de Pensilvania.
