Una persona "bien mandada"
La "Migra" a mi me agarró trescientas veces - digamos - pero jamás me domó, a mí me hizo los mandados…". Así cantaba Vicente Fernández y algunas personas preguntaban dos cosas: ¿Qué es la Migra? y ¿cuáles son los mandados?
Pues la Migra es la Policía de Inmigración de Estados Unidos y la expresión "me hacen los mandados" es equivalente a decir: "hacen lo que yo les mande", y en este caso, se le adjudicaba a una persona que andaba en Gringolandia sin papeles, es decir, en calidad de inmigrante ilegal.
En México, es esa una frase retadora y desafiante, porque además "los mandados" es un concepto popular que tiene sus derivaciones. Supongamos que una señora va a hacer alguna gestión o a arreglar algún asunto, llega una persona a su casa y le pregunta al niño: ¿Dónde está tu mamá". "Fue a un mandado", contesta el chamaco.
Además, puede ser que la señora haya ido a comprar "todas las cosas del mandado", como "La Patita" de Cri Cri. En este caso, las cosas del mandado son los comestibles y otros productos de "la despensa" y probablemente la señora se haya llevado una bolsa para transportarlas, la cual es conocida precisamente como "la bolsa del mandado".
La señora regresó un poco molesta porque sin que ella le diera motivo, el carnicero - que es muy atrevido - le echó un piropo y ella se quejaba de que el tipo "es muy mandado", o sea, que se sobrepasa en sus comentarios y le falta al respeto.
El verbo mandar es muy versátil y lo digo porque tiene varios significados: en principio, mandar es ordenar: el jefe ordena a sus subordinados, el rey ordena a sus súbditos y la señora manda al niño a comprar el pan. En la casa, el señor presume de que en su casa él es el que manda y luego agrega quedito: "sí, soy el que manda… los pantalones a la tintorería", o sea, que mandar es también enviar.
En un mensaje a su novia, es probable que el muchacho le mande a ella muchos besos y apapachos. El matador que domina al toro se dice que es muy mandón, como se le llama también a un tipo que abusa de su posición o su poder y se la pasa dando órdenes "a diestro y siniestro".
Una persona que obedece fielmente lo que se le ordena se dice que es muy bien mandado, o que es muy mandable, y cuando le llaman para darle esa orden, probablemente al oir su nombre contestará: ¡Mande! O más educadamente, ¡mande usted!, expresión que algunas personas condenan porque les parece demasiado servil, pero yo digo en todo caso: ¿Habrá algo más servil que ¡para servirle! o ¡para servir a usted!, una expresión que prácticamente todos usamos y nadie critica.
Luego, vienen también los derivados del verbo como la demanda, la comanda y el comandante. La demanda es una súplica, petición o solicitud. La comanda es la nota que levanta el mesero cuando el cliente le dice qué es lo que va a querer y el comandante es originalmente el que comparte el mando, pero actualmente se refiere a un jefe generalmente militar o policiaco o bien al piloto que tiene el mando de un avión.
ESCRÍBALE A JUAN RECAREDO: [email protected].
PREGUNTA DEL PÚBLICO:
Marcela Salazar pregunta: En un programa de TV, el conductor dijo que cierto animal se camufla, ¿se dice y se escribe así? ¿Existe el verbo camuflar?
RESPUESTA:
Como usted lo oyó, es correcto. Existe el verbo camuflar, que es "disimular la presencia de una cosa, dándole la apariencia de otra". Algunas personas dirían que "el animal se camuflajea", pero eso es gramaticalmente incorrecto.
Me retiro con una frase que dice mi amiga decepcionada: Los hombres son como las copiadoras: sólo sirven para la reproducción. ¿Cómo dijo? LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA.
