'Estuve allí presente para que mi pieza no se estropease, no sé si la van a instalar en un nuevo lugar', detalló entre sollozos, al calificar el proceso de retirada como un 'momento emotivo' que le hizo sentirse como si 'hubiese perdido un hijo'. (ARCHIVO)
Las autoridades bangladesíes retiraron una estatua de la diosa griega de la justicia, Temis, colocada el pasado diciembre en la sede del Tribunal Supremo en Dacca, después de que se produjesen varias protestas en su contra por parte de organizaciones radicales que la consideraban antiislámica.
Los trabajos comenzaron la pasada medianoche y se prolongaron hasta bien entrada la madrugada bajo la supervisión del escultor Mrinal Haque, a quien el máximo órgano judicial ordenó retirar su obra de las instalaciones, explicó el artista.
"Estuve allí presente para que mi pieza no se estropease, no sé si la van a instalar en un nuevo lugar", detalló entre sollozos, al calificar el proceso de retirada como un "momento emotivo" que le hizo sentirse como si "hubiese perdido un hijo".
Las autoridades no permitieron a vecinos ni medios de comunicación acercarse al lugar, en cuyas inmediaciones se reunió un grupo de cerca de medio centenar de activistas seculares para protestar por la retirada de la estatua.
"Es una maniobra política del Gobierno para satisfacer a los islamistas. Nuestro arte y cultura serán las víctimas de esto", denunció en declaraciones el líder del grupo promotor del laicismo Ganajagaran Mancha, Imran Sarkar.
La imagen de Temis, en la que aparece con una venda en los ojos, con una espada y la balanza de la Justicia, su principal símbolo, había sido colocada en la sede del máximo órgano judicial el pasado diciembre.
En los meses siguientes, la organización apolítica islamista Hefazat-e-Islam llevó a cabo varias protestas en la capital bangladesí para pedir que se quitase la figura de la diosa griega, ya que el islam prohíbe la representación de deidades en imágenes.
La formación, que se dio a conocer en 2013 tras demandar pena de muerte para los blogueros defensores de ideales seculares, ha sido criticado por organizaciones de derechos humanos por reclamar al Gobierno que abandone sus políticas de igualdad de género.
La primera ministra bangladesí, Seikh Hasina, aceptó retirar la estatua de Temis el mes pasado durante una reunión con unos 300 representantes de Hefazat-e-Islam y otros grupos religiosos.
Bangladesh, un país de mayoría musulmana, sufrió entre 2013 y 2016 una oleada de ataques de corte islamista contra pensadores laicos, ciudadanos extranjeros y representantes de minorías religiosas en la que fueron asesinadas más de 70 personas.
