El capitalino José Mauricio se llevó una oreja de la Plaza de Toros Alberto Balderas. (Erick Sotomayor)
El diestro capitalino José Mauricio cortó ayer una oreja y fue el gran triunfador del Festival Taurino realizado en homenaje póstumo a Rodolfo Rodríguez "El Pana", celebrado en la Plaza de Toros Alberto Balderas, donde hace un año sufrió un percance que posteriormente le cobró la vida.
Los toros correspondieron a la ganadería potosina de Santoyo, regulares, parados y faltos de transmisión, por lo que los protagonistas no pudieron lucir en el ruedo, con excepción del segundo, que mostró bravura y al que le cortaron el apéndice.
Antes de cortar plaza, apareció una calandria en el ruedo y en su asiento, una fotografía del "Brujo de Apizaco", en honor al matador tlaxcalteca, quien siempre arribaba en ese excéntrico carruaje a las plazas de toros.
Buena entrada de aficionados en sombra y desolado en su contraparte, con un astro rey que pegaba de frente y a una temperatura de 33 grados centígrados. Las notas musicales corrieron a cargo del Mariachi Regional.
JAVIER CONDE
El español no pudo ni con la muleta ni con la espada, por lo que al escuchar los tres avisos por parte del juez José Luis Orozco, su enemigo "Maestro" de 435 kilogramos de peso, regresó a los corrales.
Con el capote, realizó vistosas verónicas y remató con una media, para que en el último tercio, metiera muletazos de tanteo y luego derechazos muy lejanos, sin dejar ver su clase privilegiada y la personalidad arrolladora que lo caracteriza.
Falló con el acero hasta en cuatro ocasiones y tardó mucho en descabellar al burel, por lo que se le fue vivo. Pitos y algunos abucheos para el ibérico que se lamentó en el callejón.
JOSÉ MAURICIO
El triunfador tuvo enfrente a "Panadero" con 430 kilos, al que con el capote, le metió verónicas, para rematar con una apoteósica revolera. En el segundo tercio, hizo un quite por mandiles.
Con la muleta lució, sobre todo por el lado izquierdo, sacándole naturales al astado que mostró bravura y nunca rehuyó. La estocada fue tendida, pero suficiente para hacerlo doblar, donde el respetable junto con el juez coincidieron con la merecida apéndice.
ERNESTO JAVIER TAPIA
Le tocó "Leyenda" con 420 kilos al que recibió con farol de rodillas y luego con un lance a dos pies. Tras el castigo con banderillas, hizo un quite por chicuelinas antiguas y remató con una revolera.
Con la muleta, hilvanó buena tanda de derechazos que coreó el público y cuando se encaminaba a lograr la oreja, falló en su primer intento con la espada, dejando la segunda a la mitad, matando con descabello. Saludó al tercio y dio vuelta al ruedo para ser aplaudido.
ANTONIO LOMELíN JR
Enfrentó a "Inolvidable", un ejemplar negro bragado y cornicorto de 430 kilogramos, el cual lo desarmó en su primer enfrentamiento, para luego realizar chicuelinas en los medios.
Tras el castigo con las varas, la res no embistió y cuando lo hizo, se quedó muy corto, por lo que el ahora discípulo de Arturo Gilio Hamdan, optó por matarlo con una mortal y efectiva estocada.
