Gran Bretaña no había parado su producción eléctrica a base de carbón desde la Revolución Industrial. (ESPECIAL)
Fue entre las 23:00 del horas jueves y las 23:00 horas del viernes de la semana pasada cuando la central West Burton 1 dejó de suministrar electricidad a la red nacional debido a que agotó el carbón de producción, lo cual fue anunciado por el Centro Nacional de Energía de Reino Unido (NG Control Room por su traducción al inglés).
Gran Bretaña no había parado su producción eléctrica a base de carbón desde la Revolución Industrial, por lo que el freno de actividades en la central eléctrica West Burton 1, la cual es la única planta térmica de carbón operativa en Reino Unido, supuso un momento histórico para activistas del medio ambiente.
No obstante en mayo del 2016 Gran Bretaña ya había enfrentado un freno similar tras no producir energía a base de electricidad cerca de 19 horas, por lo cual, Sean Kemp, portavoz del NG Control Room aseguró que ello solo suponía "simbólicamente un hito, el fin de una era".
Según expertos, el freno de la producción no debe ser considerado un episodio aislado, puesto que con anterioridad se habían presentado eventos similares pero de menor duración como el citado caso de mayo del 2016.
De acuerdo con indicadores del NG Control Room, el año pasado el carbón aportó únicamente el 9% de la energía generada en el país, frente a un 23% en 2015 y un 40% en 2012.
Actualmente Reino Unido pertenece a los países miembros del Tratado de París Contra el Cambio Climático, acción por lo cual la nación británica acordó la eliminación paulatina de la electricidad producida a base de carbón con miras hacia el 2025 mientras impulsa la creación de energías renovables con bases solares y eólicas.
