Los habitantes de la pequeña ciudad de Lebedyan, en Rusia, han experimentado un extraño suceso, sus calles se convirtieron en ríos de jugo de frutas debido a un accidente en una planta embotelladora.
La ciudad se inundó con un líquido de colores después de que en los depósitos de la planta embotelladora de Lebedyansky, una filial de Pepsico, se derrumbara el techo, provocando que se derramaran varias toneladas de los jugos que se encontraban en los contenedores, según informa la agencia ‘Associated Press’.
Dos de los trabajadores de la planta resultaron heridos a raíz del accidente.
Lebedyansky, el principal fabricante de jugos de frutas en Rusia, ha declinado hacer comentarios respecto al accidente, mientras que trabajan ya para reparar los daños dentro de su planta. Por su parte las autoridades de la ciudad monitorizan el río más cercano, el río Don, para analizar las posibles consecuencias ambientales que se podrían desatar de todos estos productos llegando hasta su caudal.
La compañía Lebedyansky es el principal fabricante de jugos de frutas en aquel país. (YOUTUBE)