El proceso de identificación podría tardar hasta tres meses por cuerpo. (ARCHIVO)
Alrededor de las 10 de la noche del martes, los restos de los cuatro cuerpos exhumados en la región norte de Coahuila, particularmente en los municipios de Ciudad Acuña y Piedras Negras, fueron entregados en el Servicio Médico Forense de Saltillo, Coahuila para iniciar el proceso de identificación y el cual podría tardar hasta tres meses por cuerpo.
“Teniendo nosotros las muestras que se tendrán que enviar al laboratorio de la Policía Científica y un laboratorio particular, a la par. Nosotros estamos hablando un proceso de identificación de aproximadamente tres meses por cuerpo”, señaló José Ángel Herrera Zepeda, titular de la Subprocuraduría de Personas Desaparecidas y No Localizadas de Coahuila.
Lo anterior debido a que una vez en la capital del estado, los especialistas que trabajan en la mesa forense, primero realizarán varias acciones desde el punto de vista antropológico, criminalística, odontológico y médico; donde se estima que los peritos trabajarán aproximadamente 15 días en dicho proceso de identificación.
“Esos restos quedan en Saltillo y el día de hoy y mañana, está el proceso de lavado y extracción de material biológico para el estudio de ADN”, explicó Silvia Ortiz, representante de Grupo Vida de Torreón, quien detalló que los restos quedaron el Servicio Médico Forense de la Procuraduría General de Justicia del Estado en la capital del Estado.
Lo anterior luego de que la unidad especial en la que fueron trasladados los restos de los cuatro cuerpos exhumados, fueron escoltados en caravana por los integrantes de los colectivos de familias de personas desaparecidas; vigilando que se llevará de forma adecuada la cadena de custodia de dichos restos.
Respecto a los restos de los tres cuerpos calcinados que se llevaron del Semefo de Piedras Negras, pese a las tomas de muestras que les realizaron anteriormente por las autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado, nunca se entregaron resultados.
Inclusive a la madre de dos de las presuntas víctimas le tomaron muestras hasta en cuatro ocasiones; siendo la última en diciembre de 2016.