Luis Muruato quedó maravillado con el Estadio de la Revolución.
"Todo era muy diferente, hoy el estadio está bastante bonito, simplemente el alumbrado, el césped ni se diga, todo ha cambiado", fueron las palabras de Luis Muruato al volver a pisar el césped del Estadio Revolución.
El pelotero que hizo el último out del campeonato de 1950 del Unión Laguna fue recibido por jugadores y directivos de Vaqueros, quienes cordialmente lo saludaron y escucharon los consejos que les dio el exjardinero lagunero.
Al momento de charlar con Ricky Álvarez, Muruato Puente le deseó la mejor de las suertes en la campaña y reconoció su labor como cuarto bate del equipo guinda, "éxito hijo, tú como cuarto bate del equipo tienes un enorme compromiso con la directiva, pero sobre todo con la afición, ellos son los que nos apoyan y motivan para conseguir los títulos" dijo Luis Muruato.
Por su parte de estelar primera base comentó que no se imaginaba jugando en los tiempos de Muruato, ya que el nivel de competencia era más exigente, bastaba con recordar que habría jugadores afroamericanos de buen cartel y laguneros estelares en la novena.
Por último Álvarez le agradeció los consejos y la charla y aseguró que el equipo dará todo para volverle a dar un título a esta afición que tanto lo necesita.
Muruato pudo volver a estar sentado en el Doug out del equipo, recordando que en aquel 1950 sólo era un pedazo de banca y una cubeta y era todo lo que había.
Muruato charló con Ramón Orantes, mánager del Laguna, quien efusivamente lo saludó y le dio la bienvenida, asegurando que ya había leído la entrevista publicada en este diario, y así pudo saber quién era y qué hizo con el equipo, el expelotero lagunero le deseó mucha suerte en su debut como mánager, así como a todos los jugadores del equipo.
Para finalizar, Muruato dialogó con el gerente deportivo del club, David Cárdenas Cortés, a quien lo felicitó por el acierto de volver a ser Unión Laguna y recuperar los colores guindas que aclamaba la afición y le realizó la pregunta del porqué no estaba el nombre de José "Chanquilón" Díaz en la barda de jardín central como especie de homenaje, a lo que Cárdenas Cortés respondió que era su primer año, y que desconocía el dato, pero que lo tomaría en cuenta y claro que un gran talento del beisbol lagunero merecía tal reconocimiento.
Así terminó Murutao Puente su recorrido por el diamante que un día él, en compañía de "Chanquilón" Díaz, Leo Rodríguez, Beny Brown, José "Zacatillo" Guerrero y dirigidos por Guillermo Garibay levantaron, el que es hasta la fecha, el último laurel del Unión Laguna.
