EL tan famoso Martin Luther King dio aquel memorable discurso ante una gran multitud en la ciudad de Washington en que en un momento, el defensor de su raza de color dijo aquello de "Tuve un Sueño". Y cada vez que pasa un nuevo Mundial de Beisbol, tengo "un sueño", un deseo, de que alguna vez logremos integrar un equipo de México exclusivamente por jugadores cien por ciento nacionales. Con las reglamentaciones del Mundial ya sabemos que se permite tener en el club a bastantes extranjeros que tienen algo de mexicano y ya vimos cómo en el primer Mundial jugaron los hermanos Hairston, Jerry y Scott, porque su mamá es mexicana. Y en este Mundial del 2017 se les pasó la mano llevando a jugadores nacidos en Estados Unidos, que crecieron en Estados Unidos y que viven en Estados Unidos, pero que vienen de raíces mexicanas. Y en el caso de Chris Roberson fue un descaro total hacerlo "mexicano" porque está casado con una dama mexicana.
Recuerdo que una vez el muy atento papá del gran jonronero Reggie Jackson me dijo que lo único que tenía su hijo de mexicano es que una vez estuvo casado con una mexicana pero ya se había divorciado. Esto porque un cronista de la televisión había manifestado durante una Serie Mundial que Reggie tenía raíces mexicanas pero resultó falso ya que Mr. Octubre no tiene nada de nuestro país.
Se aprecia mucho el esfuerzo de todos nuestros jugadores, de los peloteros de doble nacionalidad y de los extranjeros como Roberson y Laird, pero ése no es el equipo mexicano que muchos deseamos. Y vaya si sobran buenos peloteros cien por ciento mexicanos para armar una buena selección.
Llevamos ya dos Mundiales seguidos en que nos eliminan en la primera fase y en este torneo celebrado en nuestra casa, en Guadalajara, solamente se logró una victoria con dos derrotas. Creo que ha llegado la hora de cambiar a los que arman al equipo, a la familia González, para buscar nuevas ideas y nuevas rutas. Es imperativo mirar más hacia nuestro Beisbol que urgar en las Ligas Menores americanas buscando a todo prospecto que tenga raíces mexicanas. Lo de la doble nacionalidad está bien para los que escriben la constitución pero en el fondo no se engaña a nadie. O eres mexicano o eres norteamericano.
El sueño de un equipo de solamente mexicanos lo vamos a tener en la próxima temporada de la Liga Mexicana cuando tanto Diablos Rojos del México como Guerreros de Oaxaca han decidido utilizar exclusivamente al talento nacional ya que para eso desarrollan jugadores en las academias y en las sucursales.
Y el próximo sábado a las cuatro de la tarde en el Parque Fray Nano vamos a conocer al Diablos Rojos tricolor del 2017 jugando un partido de entrenamiento contra unos Acereros de Monclova que ha heredado muchos jugadores que fueron del campeón Puebla. Y el domingo a las 12 del día otro juego de preparación contra el monarca poblano. La entrada costará solamente 50 pesos y será muy interesante ver al nuevo equipo escarlata en estos partidos de preparación. Veremos al sueño convertido en realidad.
