En Chicago, un joven no soportaba el frío de la ciudad y encontró la solución a la falta de calefacción en su automóvil.
Sin importar lo peligroso que podía resultar, el sujeto colocó un pequeño tanque de gas en la parte trasera del auto y prendió fuego al escape para provocar una flama y calentar todo el interior.
Su amigo capturó el cómico experimento.
A falta de calefacción...