Finalmente los votantes hicieron justicia con el famoso mánager Cananea Reyes que el jueves pasado fue anunciado entre los nuevos elegidos al Salón de la Fama de las Series del Caribe. Cananea, quien ya fue elegido al Salón de la Fama del Beisbol Mexicano y su número 10 fue retirado por los Diablos Rojos del México con los que conquistó cinco campeonatos, ganó dos Series del Caribe como mánager, quedando en segundo lugar en otra ocasión y logrando cuatro campeonatos en la Liga del Pacífico Mexicano.
Fue Cananea el que llevó a un equipo de ese circuito a la primera corona caribeña cuando en febrero de 1976 logró los máximos honores con un Naranjeros de Hermosillo que tuvo en Héctor Espino al jugador Más Valioso de la competencia y con el cátcher Sergio Robles teniendo una gran serie con el bat y detrás del home. El equipo Naranjeros se coronó en un juego en Cibao, ciudad que es la casa de las Águilas Cibañeas, ya que el torneo se jugó allí y en Santo Domingo.
Al regresar a Hermosillo hubo un gran recibimiento en la capital de Sonora y la fiesta terminó en el nuevo estadio de la ciudad que fue entonces nombrado Héctor Espino en honor al formidable bateador mexicano.
Recuerdo que cuando lo entrevisté me llegó a comentar con su modestia acostumbrada: "Ojalá un día no se arrepientan de haberle puesto mi nombre."
Ya en el ocaso de su maravillosa carrera y en otra Serie del Caribe celebrada en Hermosillo, algunos aficionados llegaron a chiflarle a Espino por la mala serie que estaba teniendo, pero los demás fanáticos reaccionaron a las protestas organizando una gran ovación al formidable bateador.
Con ese campeonato logrado por el equipo comandado por Cananea Reyes terminaron las frustraciones de varias Series del Caribe en que nuestros equipos fueron llamados los "patitos feos" de la competencia al quedar casi siempre en malos lugares. La Liga Mexicana se unió a las celebraciones y dedicó la portada de su libro "Quién es Quién" de 1975 a los Naranjeros y su presidente, Arcadio Valenzuela, lanzó la primera bola de la temporada en el Parque del Seguro Social.
Más adelante y al dejar a los Naranjeros por problemas con uno de sus directivos, Cananea Reyes fue a manejar al Águilas de Mexicali al que hizo campeón del circuito y luego logró en Maracaibo, Venezuela, su segunda corona en Series del Caribe. En esta ocasión el momento inolvidable fue cuando Cananea le ordenó un toque de "squeeze play" al jonronero Nelson Barrera para dejar en el terreno al equipo de República Dominicana en el juego clave que puso a los Águilas al borde de la coronación. El perfecto toque de Nelson quedó en los recuerdos principales de estos torneos. El famoso toque de bola fue contra las Águilas Cibaeñas que manejó Winston Llenas.
Igualmente entre los elegidos el jueves al Salón de la Fama Caribeño está el cronista Alfonso Araujo quien ha escrito varios libros sobre las Series del Caribe y le dio estadísticas a las series del mes de febrero. Honor a quien honor merece.
