Más de un centenar de convictos, entre ellos destacados miembros de un grupo yihadista, escaparon hoy de una cárcel en el sur de Filipinas después de un asalto armado contra las instalaciones penitenciarias.
Los atacantes irrumpieron poco después de medianoche en la prisión provincial de Cotabato Norte, en el sur de la isla de Mindanao, y mantuvieron un tiroteo de una hora con los guardias de seguridad, de los que uno resultó muerto y un recluso quedó herido, reporta el diario local Philstar.
La fuente señala que el ataque permitió escapar a un total de 158 convictos de los aproximadamente 400 que alberga la prisión, mientras otros medios filipinos rebajan la cifra de evadidos a unos 130.
Entre ellos se encontrarían importantes miembros de los Luchadores por la Liberación Islámica del Bangsamoro (BIFF), uno de los grupos yihadistas que operan en la sureña región de Mindanao, donde reside la mayoría de la población musulmana del país.
La acometida fue "un rescate planeado de determinados reclusos", declaró a los medios el director provincial de la cárcel, Peter Bungat, tras asegurar que hubo un corte de luz previo al ataque en el que habrían participado hasta un centenar de hombres armados.
La policía no ha confirmado la identidad de los atacantes, mientras la investigación centra las sospechas en el BIFF, que ha negado la participación en el suceso a través de una entrevista de su portavoz, Abu Misry Mama, a una emisora de la ciudad de Cotabato.
Se trata del segundo ataque de este tipo en menos de seis meses después de que el pasado agosto el Grupo Maute, vinculado al Estado Islámico (EI), liberara a ocho militantes detenidos en una prisión de la ciudad de Marawi, también en Mindanao.
Mindanao, donde residen unas 22 millones de personas, vive un conflicto separatista islámico desde hace cuatro décadas que ha causado entre 100.000 y 150.000 víctimas mortales y ha paralizado el desarrollo de la región, rica en recursos naturales.
