El 21 de febrero ganó la afamada Copa del Rey, con victoria del Real Madrid por 85-81 sobre Gran Canaria, para ser el tercer título consecutivo de los once que lleva el cuadro blanco.
Cuando niño -comentó- se rieron de él por decir que su sueño era jugar en la NBA, al paso de los años lo cumplió a los 26 de edad, en la actualidad es un pilar de las glorias del Real Madrid y por ello Gustavo Ayón es el basquetbolista mexicano de 2016.
Aunque tiene una mancha este año, un tache de compromiso moral con el país, por no haber integrado la selección para el preolímpico de Turín, Italia, pero a nadie se le puede obligar de ser integrante de una selección nacional, sin embargo, desdeñar la representación del país queda como un estigma de por vida.
Nadie sabe qué hubiera pasado si formaba parte del equipo, lo único cierto es que el tricolor de baloncesto perdió mucho potencial es su aspiración de clasificar a los Juegos Olímpicos Río 2016, que serían sus primeros desde Montreal 1976.
A nivel club le fue bien, aunque no de maravilla como en 2015, cuando ganó todas las finales con el Real Madrid, y esta vez se conformó con dos trofeos y uno adicional como el Jugador Más Valioso de la final de la Copa del Rey.
El 21 de febrero ganó la afamada Copa del Rey, con victoria del Real Madrid por 85-81 sobre Gran Canaria, para ser el tercer título consecutivo de los once que lleva el cuadro blanco.
Esa noche, el nayarita de 31 años de edad fue electo el Jugador Más Valioso, por su promedio de 13.7 puntos, 6.3 rebotes y 20.3 puntos de valoración en la fase final, y ese trofeo también es uno de los más codiciados en lo individual.
Otro gallardete fue el trofeo de campeón de la Liga de la Asociación de Clubes de Baloncesto, al derrotar al acérrimo rival Barcelona por un 3-1 en la serie final, con el ingrediente de que por primera vez remontaron un 1-0 y en cancha en contra y hacia 22 años que no repetían en el trono.
Blancos y blaugranas terminaron la campaña regular con 29 victorias y cinco derrotas, sortearon las etapas de playoffs para verse las caras en la final, con una primera victoria de Barcelona por 100-99, pero después el Real Madrid se impuso al hilo por 90-70, 91-74 y 91-84.
La euforia embargó al entrenador Pablo Laso, a los jugadores, entre ellos Gustavo Ayón, quien alargó su éxito y su pasión por el baloncesto.
En el mayor de los flancos, en la Asociación Nacional de Baloncesto (NBA), el chihuahuense Jorge Gutiérrez transitó entre Canton Charge, de la Liga de Desarrollo, Bucks de Milwaukee y Hornets de Charlotte, con el cual participó en la primera fase los playoffs.
Durante septiembre participó en el campamento de entrenamientos de Nets de Brooklyn y en octubre le dieron corte, para finalmente parar en el Trabzonspor Medical Park de Turquía.
Francisco Cruz jugó a principio de año en el Riga de Lituania, donde por sus buenos números fue contratado por el Fuenlabrada de España, quinteta donde jugó primero Ayón previa a su ida a la NBA.
El de Nogales, Sonora, no tiene los mismos reflectores de Ayón con el Real Madrid, pero labra su camino con este equipo que es de madia tabla para abajo.
