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Noelia Garella tiene 31 años y se ha convertido en l primera persona con síndrome de Down que imparte clases en un jardín de niños en Argentina.
Su historia es un ejemplo a seguir que ha despertado la admiración de muchos. Desde 2007 se graduó como maestra para preescolar, pero debido a varios obstáculos, algunos por su enfermedad, no pudo ejercer sino hasta 5 años después.
Sus actividades incluyen leerles cuentos a los niños y escuchar música o dibujar con ellos. "De chiquita me gustó maestra, porque amo a los chicos, así que les dije a mis papás y empecé a estudiar”, contó ella en una ocasión al periódico ‘La Nación’.
Y aunque sufrió discriminación en un inicio por parte de algunos en el plantel, la directora, los maestros, los padres y los alumnos la miran ya como un ejemplo a seguir y dicen estar muy contentos con su desempeño.
