Case Keenum lanzó 4 pases de intercepción. (AP)
Los Giants de Nueva York sacaron provecho de cuatro intercepciones a Case Keenum para derrotar 17-10 a los Rams de Los Ángeles en el primer partido de NFL jugado en la casa del rugby inglés en Londres.
Keenum, que llegó al encuentro después de la mejor actuación en su carrera, llevó a los Rams a la yarda 15 del rival, pero a 50 segundos del final regaló un pase al cornerback Dominique Rodgers-Cromartie en el extremo izquierdo de la zona de anotación. Su objetivo, Brian Quick, había cambiado su ruta.
"Las ventanas son muy reducidas, y los pases tienen que ser más precisos", reconoció Jeff Fisher, el entrenador de los Rams. "Preferiría hacer cambios de receptor que hacer uno con el quarterback".
La victoria mantuvo a los Giants (4-3) en buena forma dentro de la reñida División Este de la Conferencia Nacional, donde ningún equipo tiene marca perdedora. Los Rams (3-4) sufrieron su tercera derrota consecutiva.
Los Giants llegaron a Londres con la peor diferencia en balones perdidos de la Conferencia Nacional con menos 10. Esa cifra empeoró a menos 11 en su segunda jugada ofensiva luego que su tight end Larry Donnell soltó el balón en la yarda 35 de Nueva York, lo que llevó al único touchdown de los Rams, una recuperación de 10 yardas de Tavon Austin.
Pero los Rams no pudieron defender esa temprana ventaja y en vez de eso apretaron el botón de autodestrucción. Keenum lanzó dos pases de intercepción, ambos en desvíos sobre zonas saturadas del terreno, al safety Landon Collins, y dos más en la zona de anotación a Rodgers-Cromartie.
Tras interceptar el primer envío, Collins devolvió el balón 44 yardas, para un touchdown en el segundo cuarto. Eludió varios intentos de los Rams por derribarlo, para empatar el marcador.
"Debo haber corrido al menos 100 yardas en esa jugada", dijo Collins, sonriente. Hasta el domingo, había interceptado sólo un pase en su carrera de dos años.
