Dice que no representa ningún riesgo en la operatividad ni la capacidad crediticia del municipio. (FERNANDO COMPEÁN)
Asegura el alcalde Miguel Riquelme Solís que él no dejará “sorpresas” respecto al pasivo real de su administración al final del 2017. Dice que lo que se ha informado en las cuentas públicas que presenta la Tesorería Municipal eso es lo que hay e incluye pasivo heredado y deuda bancaria dejada por la anterior administración.
Expresa que ese pasivo “como nos comprometimos desde un principio, se saldará en su mayor parte al terminar la actual administración”.
Dice que no representa ningún riesgo en la operatividad ni la capacidad crediticia del municipio.
Según lo que expuso el tesorero Enrique Mota Barragán en la sesión de la Comisión de Hacienda y Cuentas Públicas, el pasivo al mes de septiembre es de 607 millones de pesos. 85 millones es la deuda bancaria a largo plazo con Banobras, heredada por la anterior administración municipal.
Del pasivo en mención, alrededor de 400 millones son generados durante 2014, 2015 y 2016 del actual gobierno.
Según Riquelme, una parte de ese pasivo se abatirá al mes de diciembre y el resto, durante el año entrante para dejar “ tablas, es decir, un pasivo manejable”.
Descarta el alcalde que en lo que resta de su administración, se vaya a solicitar algún tipo de crédito, “aunque se justificaría dado el volumen de obra que traemos actualmente y la que ya hemos desarrollado”.
Enrique Mota señala que el pasivo que se ha generado en el actual gobierno municipal es por inversión y proveedores.
Dijo que entre diciembre y enero se pagará el adeudo por 30 millones de pesos al Fondo de Pensiones, 18 millones de pesos para el Hospital Municipal, el cual se va a escriturar dentro de los próximos dos meses y el pasivo de 45 millones de pesos para PASA, heredado también del anterior gobierno.
“Ese lo pagaremos durante el 2017 y ya llegamos a una renegociación con la concesionaria del servicio de limpieza”, explica Mota Barragán.
La administración de Eduardo Olmos dejó un pasivo de alrededor de 546 millones de pesos del que ya se ha pagado un 75 por ciento.