Hay 28 errores en la serie Narcos, según el hijo de Pablo Escobar
Sebastián Marroquín, el hijo del narcotraficante colombiano Pablo Escobar, señaló en su página de Facebook que la segunda temporada de la serie de Netflix, Narcos, tiene por lo menos 28 errores en la historia de acuerdo con lo que, dice él, realmente sucedió en la vida real.
"En nombre de mi país y en honor a la verdad real de los hechos acontecidos entre los años 80 y 90, me veo en la obligación de exponer los gravísimos errores de una serie que se autoproclama como veraz, cuando dista muchísimo de serlo, insultando así la historia de toda una nación y de muchísimas víctimas y familias", escribe el arquitecto y escritor, quien cambió su nombre a Sebastián Marroquín tras la muerte de su padre.
Entre los errores que enlista se encuentran:
Juan Pablo Escobar era seguidor del Deportivo Independiente Medellín, no el de Atlético Nacional.
Carlos Henao no era un narcotraficante como la serie presenta. "Era un arquitecto empírico [...] nunca se involucró en actividades ilícitas", afirma Sebastián Marroquín.
Los cárteles de Medellín y de Cali nunca negociaron quedarse con Miami y Nueva York como plazas de narcotráfico.
Pablo Escobar nunca mató personalmente a ningún “Coronel Carrillo", como le llaman en la serie al Jefe del Bloque de Búsqueda.
La abuela paterna de Juan Pablo traicionó a su padre y se alió con su hijo mayor Roberto. Además, negociaron con los ex socios de Pablo Escobar, Los Pepes para seguir viviendo en Colombia.
Durante la fuga de la cárcel La Catedral sólo un guardia de la cárcel resultó muerto, además Escobar “no tuvo contactos ni ayuda de la ley” para escapar.
La idea de crear Los Pepes (acrónimo de Perseguidos por Pablo Escobar) no fue propuesta por la CIA a los hermanos Castaño. "Fue Fidel Castaño quien lo decidió con la complicidad del Cártel de Cali y las autoridades locales y extranjeras que hicieron la vista gorda a miles de crímenes y desaparecidos", escribe Juan Pablo.
Había un pacto de no tocar las familias y mi padre lo cumplió, señala el escritor, quien asegura que Escobar nunca atacó a la hija de Gilberto Rodríguez, líder del Cártel de Cali.
