La averiguación de la FBI sobre el uso de servidores cibernéticos privados por Clinton fue iniciada en julio del año pasado, luego de una revelación por parte del diario The New York Times. (ARCHIVO)
La Oficina Federal de Investigaciones (FBI) reveló hoy los archivos de la averiguación sobre los correos electrónicos de Hillary Clinton, miles de los cuales contenían información confidencial, pero sostuvo que ninguno fue “hackeado”.
Los correos electrónicos, que corresponden a las comunicaciones personales durante la gestión de Clinton como secretaria de Estado, fueron almacenados en servidores cibernéticos privados, sin que en su momento hubiera algún tipo de reclamo por parte de la dependencia.
“Agencias de inteligencia de Estados Unidos determinaron que 81 secuencias de correos (...) contenían información clasificada que iba de “Confidencial” a “Máximo secreto (Top Secret)/Programa de Acceso Especial”, añadió la FBI.
De todos los correos detectados por las agencias especializadas, incluida la Agencia Central de Inteligencia (CIA), un total de 68 siguen siendo considerados como “clasificados”.
El Departamento de Estado identificó además otros dos mil correos adicionales, tipificados como “Confidenciales” y uno como “Secreto”.
“La investigación de la FBI y el análisis forense no encontró evidencia confirmando que las cuentas de correo electrónico de Clinton o sus aparatos móviles hubieran sufrido una intrusión cibernética", concluyó la FBI.
En una entrevista con la FBI en julio pasado, la actual candidata presidencial del Partido Demócrata dijo a los investigadores que no recordaba haber recibido correos electrónicos que ella considerara que no deberían estar en un sistema no clasificado.
Asimismo, dijo no recordar que el uso de servidores cibernéticos privados hubiera provocado alguna inquietud legal dentro del Departamento de Estado.
La averiguación de la FBI sobre el uso de servidores cibernéticos privados por Clinton fue iniciada en julio del año pasado, luego de una revelación por parte del diario The New York Times.
En julio pasado, el director de la FBI, James Comey, tomó la decisión de no encauzar criminalmente a Clinton, a pesar de que consideró que hubo un manejo negligente de información clasificada en correos electrónicos utilizando un servidor privado.
El director de la FBI sostuvo en su momento que sólo un pequeño número de los 30 mil correos electrónicos que fueron sujetos de la investigación presentaban etiquetas que indicaban la presencia de información clasificada en su contenido
