La violación viaja en autobús
Una mañana de febrero de este año, una joven suiza y dos argentinos apenas bajaban de un autobús de pasajeros en el municipio de Chiapa de Corzo, en Chiapas, para visitar el Cañón del Sumidero. Unos pasos adelante, debajo de un puente, encontraron a tres hombres, quienes les dijeron adiós, pero después salieron de entre los matorrales y, cuchillos en mano, sometieron a los tres extranjeros.
A los hombres los tiraron al piso, los golpearon con piedras y al ver que aún se movían, los atacaron con los cuchillos y les robaron sus pertenencias; a ella, la violaron. Minutos después huyeron, los dos jóvenes apenas podían incorporarse para solicitar auxilio y ayudar a la chica suiza y, como pudieron, llegaron a un hospital de Tuxtla Gutiérrez, donde la mujer de 23 años estuvo en shock.
Este es uno de los cuatro casos documentados en lo que va del año donde un autobús es el protagonista y aunque se desconoce la cifra que involucra a camiones foráneos, la cifra forma parte de las 29 violaciones que se denuncian al día en el país, de acuerdo con cifras del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP).
El organismo reporta de enero a mayo hubo 5 mil 257 averiguaciones previas por el delito de violación, 307 más que en el mismo lapso de 2015, cuando el registro fue de 3 mil 960 casos.
La denuncia que abrió el debate recientemente es la de Rosa Margarita Ortiz Macías, quien fue violada en un autobús de la línea ETN mientras pasaban por el Estado de México con rumbo a San Luis Potosí. Se consultó las cifras en las procuradurías y fiscalías de los estados sobre las violaciones y los sitios de mayor frecuencia, pero la mayoría no proporcionó el desglose al no contar con esa información. Al solicitar datos sobre la incidencia en autobuses foráneos de pasajeros, comentaron que no se podía saber, como en el caso de Veracruz, pues las víctimas difícilmente denuncian porque van de paso.
Otros casos no son atendidos, según algunas víctimas, como un caso que ocurrió en Tlaxcala. Fue un acuerdo de "amigos". Ella lo acompañaría a realizar su jornada de trabajo como chofer del transporte público y a cambio él la llevaría a su casa al final del día.
Ese lunes 4 de abril abordaron muy temprano el vehículo de pasaje para iniciar el recorrido de la ruta entre los municipios de Tepetitla y Nativitas, al sur de Tlaxcala. Al anochecer cuando concluyó la jornada el chofer condujo su unidad hacia unos terrenos de cultivo donde obligó a la joven a tener relaciones sexuales.
La víctima presentó su denuncia ante el Ministerio Público donde le practicaron los exámenes médicos correspondientes, cuyos resultados arrojaron que había sostenido relaciones sexuales momentos antes, "pero no presentaba rastros o huellas de violencia", dictaminó la autoridad.
PELIGRO EN LA CARRETERA
Estado de México, Chihuahua y Chiapas son las tres entidades con el mayor número de denuncias con 894 casos, 397 y 298, respectivamente, en los primeros cinco meses del año.
Sin embargo, en las estadísticas del SNSP ni las instancias estatales se especifica si el delito se cometió en la casa, escuela, trabajo, en la calle o en autobuses foráneos de pasajeros.
Y el riesgo en la carretera está presente aún en los estados donde el índice es bajo, como Sinaloa, que se encuentra en los cinco con menos casos, con 70 denuncias.
La noche del 24 de marzo, a un costado de la carretera México-Nogales, a la altura de la comunidad del Quelite, municipio de Mazatlán, Sinaloa, un grupo armado asaltó a una familia y violó a una adolescente, sin que los responsables fueran detenidos.
El hecho fue desdeñado en ese momento por el presidente municipal Carlos Faltón González, quien negó que ello "prendió los focos rojos".
El ataque ocurrió cuando una familia, integrada por tres adultos y dos adolescentes, viajaba en su auto. Los sorprendieron cuando se dirigían al sur del país e hicieron un alto para descansar y tomar alimentos.
La joven fue sometida, luego de que los cinco hombres que integraban el grupo armado atacaron a la familia cuando descendió de la unidad para dirigirse a un sanitario.
Exigen justicia para Rosa Margarita
Un contingente de mujeres, niñas y hombres marchó ayer domingo de la Plaza de Armas a la Terminal Terrestre Potosina (TTP) en demanda de justicia para Rosa Margarita Ortiz Macías, quien fue violada en un autobús de la línea ETN cuando se dirigía a San Luis Potosí.
Desde la Catedral, el arzobispo Jesús Carlos Cabrero Romero lamentó la agresión y se sumó a la exigencia de justicia. "Me uno a todas las mujeres que son víctimas; me uno y creo que debemos unirnos todos porque se está hiriendo a quien considero merece en nuestra sociedad un lugar especial", dijo el prelado. La movilización partió a las 11:00 horas de este domingo de las inmediaciones de Palacio de Gobierno del Estado con consignas de repudio a la violencia que sufrió Rosa Margarita el 8 de junio pasado a bordo de la unidad 5270 de ETN en la carretera México-Querétaro, en el Estado de México.
Los manifestantes llegaron hasta el módulo de venta de boletos de la línea de transporte foráneo, exigiendo seguridad en el transporte y que cese la violencia para las mujeres. "ETN, no te creemos; la justicia alcanzaremos", gritaron."Gobierno disculpa las molestias, pero nos están violando", plasmaron en una cartulina color naranja; además exigieron seguridad para todas en los autobuses foráneos, así como en los trayectos a bordo del transporte urbano y rural de la entidad.
En la protesta participaron familiares de Rosa Margarita, integrantes de los colectivos Río de Mujeres, Mujeres en la Ciencia SLP, Colectiva la Castilla Combativa y Movilización Vivas Nos Queremos San Luis Potosí. En escritos se quejaron por la violencia contra las mujeres y la impunidad de la que gozan los agresores en este país. Una joven, hija de Rosa Margarita, lamentó "la desafortunada situación de violencia que vivió mi mamá y quiero manifestar mi agradecimiento a las personas que han mostrado su calidad humana, empatía y solidaridad en este momento".
La lideresa del colectivo Río de Mujeres, Miriam Micalco Méndez, leyó un escrito en el que exigen a las autoridades dar con los responsables para llevarlos ante la justicia.
En el pronunciamiento dirigido a la Presidencia de la República, al Gobierno del Estado y a la línea de transporte ETN, demandaron "justicia para Margarita Ortiz y seguridad para todas las mujeres".
Pidieron que haya botones de pánico en todas las unidades de todas las líneas de transporte y baños para mujeres. Asimismo que se brinde capacitación a los conductores para garantizar seguridad a los y las pasajeras.
"Ni una asesinada más, ni una más; ni una secuestrada más, ni una más; ni una acosada más, ni una más", "Justicia para Mague, justicia para todas", reclamaron.
Otras agresiones
Lo primero que vieron fue piedras y ramas a mitad de la carretera, y segundos después varios hombres con rifles rodearon el vehículo en que viajaban María "G" y sus hijos. Uno de los sujetos que llevaba un pasamontañas se acercó al conductor para decirle que apagara el motor y descendiera de la unidad, mientras que los otros hombres procedieron a bajar las maletas del vehículo, para vaciarlas en el suelo donde tomaron los objetos de valor.
El hombre que amagó al conductor revisaba la cartera de donde sacaba las tarjetas bancarias y dinero en efectivo que guardaba. El asalto ocurría a unos 40 minutos de Palenque, en Chiapas, que aun no se divisaba a la distancia, pero estaban cerca.
Los 218 kilómetros que hay entre San Cristóbal de las Casas y Palenque, se han convertido, el principal punto donde bandas de asaltantes se ocultan a un lado de la carretera para cerrarla.
María "G" dice que esa tarde cuando fueron asaltados "muy cerca de Palenque", uno de los hombres no le sacaba las manos de los senos y está segura que se libró de una violación porque le dijo al hombre que le permitiera ver a sus hijos que para ese momento, al ver a los desconocidos empezaron a llorar, al tiempo que intentaba llevarla hacia los matorrales.
Como María "G", otras mujeres afectadas en asaltos en la vía a Palenque, Esperanza "C", Eliza "R" y Cristina "M", recibieron tocamientos en el cuerpo por parte de sus agresores, pero nunca los denunciaron.
En enero del 2015, la empresa OTISA que mueve excursionistas nacionales y extranjeros hacia Guatemala, Palenque y otras zonas de Chiapas, denunció que 48 turistas que iban a bordo de un camión a la altura del crucero de Shupá, fueron robados.
Los asaltantes obligaron a los pasajeros a entregar sus pertenencias, como cámaras fotográficas, computadoras, tarjetas de crédito y dinero en efectivo, mientras que dos turistas francesas fueron víctimas de agresiones sexuales.
Del total de turistas que viajaban en el camión sólo ocho de ellos interpusieron demanda ante el Ministerio Público de Palenque.
El año pasado, el tramo Teopisca-Comitán se convirtió en una ruta peligrosa para el tránsito de camiones, donde los asaltantes además de despojar de sus pertenencias a los pasajeros, realizaban tocamientos a mujeres y al menos una de ella fue violada y traslada al hospital del Niño y la Mujer, después de que el conductor del camión de la empresa Cristóbal Colón fue obligado a introducirse a un camino de terracería en la comunidad La Merced, del municipio de Amatenango del Valle.
