‘Pelitos a la burra’
En Nazas, Dgo. (casi el paraíso) donde pasé mi niñez y parte de mi juventud, los burros, jumentos o asnos eran o son los principales medios de transporte, carga y de trabajo en general. Todas las familias campesinas contaban con uno o dos o más burros para auxiliarse en las tareas del campo. Pero había un tipo de burro que se distinguía de los demás por una peculiaridad: si querías que acelerara su paso, le jalabas un poquito los pelos del cuadril y de inmediato reaccionaba y apuraba el paso. Pero algunos de éstos sufridos animales al parecer no les gustaba mucho dicha estrategia y lejos de acelerar, se soltaban “reparando” y en no pocos casos hacían caer al jinete.
En el caso del problema magisterial, el Gobierno federal le hizo “pelitos a la burra” y le ha resultado más que contraproducente, ya que después de tres años de que los maestros han estado insistiendo en que se les escuche, el gobierno les había venido dando portazo tras portazo tratándolos despóticamente hasta que “la burra” ya no aguantó.
Lamentable desde todos los puntos de vista lo que está sucediendo en el estado de Oaxaca y en otros estados del sureste. Ni modo de que el gobierno no lo hubiera previsto y evitado. Supuestamente quienes están a cargo del gobierno son “políticos”, pero en este caso los hechos demuestran que de políticos no tienen nada y entienden el mando como poder supremo al que hay que obedecer ciegamente sin molestarse en tratar de entender las causas de la inconformidad de los gobernados.
Muy lamentable también el papel que han venido teniendo los medios de comunicación afines al gobierno (desde luego los medios más poderosos) por las campañas de desprestigio que han emprendido contra los maestros disidentes a quienes han convertido en delincuentes, sin serlo. Y el sector empresarial que acusa a los maestros por las pérdidas que han venido registrando, debieran ir al fondo del asunto y exigirle al Gobierno federal que ponga la parte que le corresponda como principal responsable de la buena marcha del país. Si hay bloqueos de carreteras y vandalización de negocios todo eso tiene un origen y es la cerrazón del gobierno por no escuchar a tiempo a los inconformes y solucionar los asuntos antes de que sucedan los hechos lamentables de los que estamos siendo testigos.
Y desde fuera nos están observando con mucha atención. La opinión internacional confirmará que llevamos el rumbo perdido y confirmará nuevamente que no somos un país democrático ni con aspiraciones de superación. Somos un país fallido.
Va a haber ¡por fin! una negociación con los disidentes en la Sría. de Gobernación. Pero ya el Sr. Nuño salió con la tontería de que la discusión será política no sobre educación- ¡Vaya Sr. Nuño! Parece que aún no ha entendido. La discusión tiene que ser por fuerza sobre la educación y desde luego sobre la liberación inmediata de los líderes magisteriales encarcelados.
Los gobernantes deben aprender que no hay que hacerle “pelitos a la burra”
Les envío un cordial saludo.
Héctor Astorga,
Torreón, Coah.
