Cuando parecía que no cedería más opciones, España cometió un error infantil. Fue sorprendido al contraataque a tres minutos del pitido final. (AP)
España bajó la guardia ante Croacia y complicó sobre manera su empeño por proclamarse campeón de la Eurocopa por tercera vez consecutiva.
Todo lo que podía salir mal a la Roja le salió mal ayer en Burdeos al sucumbir 2-1 ante Croacia: se dejó remontar el marcador, su capitán Sergio Ramos falló un penal y cedió el primer puesto del Grupo D.
El gol de Ivan Perisic a los 87 minutos decretó el final del invicto de 12 años de España en la Eurocopa, dejando la mesa servida a un partido para alquilar balcones en los octavos de final ante Italia.
En vez de jugar contra uno de los mejores terceros en los octavos de final, deberá batirse contra la Azzurra, cayendo en un sector del cuadro de la segunda etapa, en la que Alemania y Francia asoman más adelante en el horizonte.
"Hay que pasar página y sacar conclusiones para que no nos pase esto en octavos", dijo Ramos. "Para ser campeón hay que ganar a los mejores".
El duelo contra Italia se llevará a cabo el lunes en el Stade de France, el reciento situado en los suburbios al norte de París. Se trata de una reedición la pasada final, ganada 4-0 por España en Kiev, Ucrania.
España se había adelantado a los siete minutos con el gol de Álvaro Morata, el tercero del delantero en el torneo. Morata acabó empujando el balón tras un remate de Cesc Fábregas, quien había recibido un pase entre líneas de David Silva.
Parecía que el vigente campeón iba a tener una noche placentera en Burdeos, rumbo al triunfo que le aseguraría el primer lugar.
Pero los españoles no supieron rematar a un adversario que con una gran dosis de coraje le dio la vuelta al marcador, pese a que echó de menos a su lesionado volante Luka Modric.
"En esta Euro cualquiera te puede ganar, a pesar de no ser favoritos", dijo Ramos.
La reacción croata se puso en marcha al filo del descanso, gracias al gol del atacante Nikola Kalinic, con una definición de taco que sorprendió tanto al defensor Sergio Ramos como al arquero David De Gea, tras un centro de Perisic desde la izquierda.
España pudo restablecer la ventaja a los 72, pero un penal cobrado por Ramos fue tapado por el arquero croata Danijel Subasic.
Cerca del final, como ha sido la costumbre en el torneo, Croacia puso cifras definitivas. En una jugada de contragolpe, Perisic anotó con un remate de zurda, batiendo a De Gea en el primer palo. Fue la primera victoria croata ante España en 22 años.
"La garra del equipo nos ayudó y dimos pelea hasta el último minutos", dijo Perisic. "Creo que podemos llegar lejos, si nos mantenemos jugando así hasta lo último".
España no perdía en una Eurocopa desde el 1-0 que sufrió ante Portugal en la edición de 2004.
Tampoco había encajado goles desde el empate 1-1 contra Italia, en el partido inaugural en 2012. Llevaba 689 minutos sin que le anotaran, la racha más larga en la historia del certamen.
"Nos hemos llevado un disgusto, pero no estamos eliminados. El camino no es el mejor, parece ser, pero muchas veces no se sabe dónde está el peligro", comentó el técnico español Vicente del Bosque.
