La Policía francesa ha trabajado jornadas extras con los visitantes. (EFE)
Un tribunal de Marsella sentenció a 6 hinchas de futbol ingleses ayer, imponiendo penas que van de uno a tres meses de prisión a cinco de ellos por su participación en los disturbios del fin de semana en Marsella, que empañaron un partido de la Eurocopa.
Los juicios rápidos parecen tener la intención de enviar un mensaje a quienes pretendan causar desmanes por el resto del torneo.
El abogado defensor Henri Viguier señaló que las sentencias eran una consecuencia del clima de temor en torno a la Eurocopa 2016 y "en otro contexto, las sentencias habrían sido completamente diferentes".
Alex Booth, quien cumplió sus 20 años en una celda francesa tras ser detenido, bajó la cabeza cuando el juez anunció su sentencia de dos meses.
"Injusticia", gritó el padre de Booth mientras su hijo era retirado de la corte. El padre añadió que las autoridades francesas había convertido en "chivo expiatorio a un pobre chico como Alex" y que deberían perseguir a los rufianes de verdad".
Unas 35 personas resultaron heridas en las refriegas entre aficionados ingleses y rusos, incluyendo cuatro en estado grave.
En el mismo tribunal, un francés fue sentenciado a un año de prisión y un austriaco recibió una pena de 5 meses tras las rejas, ambos por su participación en los tres días de disturbios que dejaron las calles de Marsella.
Un aficionado inglés recibió una suspensión de sentencia de un mes y ninguno de los extranjeros podrá ingresar a Francia durante dos años.
Ningún ruso fue presentado ante el tribunal, pese a que el fiscal de Marsella informó que 150 aficionados violentos rusos "altamente entrenados" fueron los responsables de gran parte de los actos de violencia.
