Tendencia. Un sondeo revela que la ventaja de Clinton sobre Tump es sólo de 3 puntos.
La ventaja de la presumible candidata demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton, sobre el virtual nominado republicano, Donald Trump, se estrechó de cinco a tres puntos la semana pasada, según un sondeo divulgado ayer por la cadena NBC News.
Clinton tiene el 48 % de los votos frente al 45 % de Trump gracias al apoyo del que goza entre los afroamericanos, los hispanos y las mujeres, de acuerdo con la encuesta.
La exsecretaria de Estado gana al magnate en el voto afroamericano de manera abrumadora, con un 84 % frente a un 9 %.
Entre los hispanos, con los que Trump ha sido especialmente ofensivo toda la campaña, la distancia es significativa, pero menor: del 65 % frente al 28 %.
La ventaja que Clinton tiene en el voto femenino, de 15 puntos, se equipara casi con la que Trump registra en el masculino, de 11 puntos, pero las mujeres son más y votan más que los hombres.
El magnate tiene un largo historial público de comentarios y actitudes sexistas que le han granjeado un índice de rechazo histórico entre las mujeres, de alrededor del 70 %, según todos los sondeos.
Es más, el multimillonario no ha dudado en afirmar que Clinton sólo está ganando a su rival Bernie Sanders en las primarias demócratas porque juega "la carta de ser mujer".
Trump, virtual candidato republicano al haberse quedado sin rivales en las primarias, tiene su gran nicho de votantes en el hombre blanco sin educación superior. Clinton aventaja al magnate por 7 puntos entre los votantes con título universitario, mientras que Trump le gana por 5 puntos entre quienes tienen sólo educación secundaria o primaria.
Un aspecto interesante que revela este sondeo es que, pese a la extendida narrativa de que el votante de Trump es de clase trabajadora, el magnate gana a Hillary por 5 puntos entre quienes cuentan con más de 50.000 dólares al año en el núcleo familiar.
Los estadounidenses que ganan menos de esa cantidad prefieren a Clinton por 20 puntos sobre el multimillonario.
Otra de las teorías que refuta esta encuesta es que el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, tendría más apoyos que Donald Trump, un candidato explosivo al que rechazan, tanto el aparato del partido como los sectores más conservadores.
El sondeo indica que casi seis de cada diez personas prefieren que Trump lidere el partido, mientras que casi cuatro de cada diez confían más en Ryan.
Preguntado por este resultado ayer en rueda de prensa, Ryan aseguró que espera que Trump sea el preferido "porque el nominado (para ser candidato a la Casa Blanca) es la persona que lidera el partido".
Entre los independientes, cuyo voto es especialmente clave en estas atípicas elecciones, Trump gana a Clinton con el 44 % frente al 36 %.
POR CIENTO
De hispanos apoyan a Trump.
POR CIENTO
De la gentede color votan por Hillary.
Bill hace campaña por su esposa
El expresidente estadounidense Bill Clinton prometió el martes a los puertorriqueños que su esposa Hillary Clinton luchará por un tratamiento justo para la isla, agobiada por una crisis económica, si es elegida presidenta de Estados Unidos.
Agregó que ella apoya las medidas inmediatas para restructurar la deuda pública de 70.000 millones de dólares que tiene la isla, en momentos en que el gobierno local se queda sin fondos para los servicios públicos esenciales.
"Ella cree que Estados Unidos no ha dado un tratamiento adecuado e igualitario al pueblo de Puerto Rico", dijo ante aplausos de una concurrencia que usaba sombrillas para protegerse del Sol. "Se supone que este país es para todos y eso incluye al pueblo de Puerto Rico".
Clinton visitó la isla antes de las primarias del 5 de junio y funcionarios dijeron que Hillary la visitará antes de los comicios. Su rival, Bernie Sanders, visitó Puerto Rico el lunes.
Clinton dijo que su esposa reduciría la dependencia al petróleo de Puerto Rico para poder reducir el costo de la electricidad y que la aspirante presidencial demócrata respalda el derecho de los puertorriqueños a votar en las elecciones presidenciales, ya que son ciudadanos estadounidenses. Clinton también ha solicitado una votación relacionada con el estatus político de la isla.
