El recorte será de 132,000 millones de pesos. (EFE)
Obligado por la turbulencia económica mundial, el gobierno de la República anunció ayer el primer recorte del año y tercero desde 2015, que será de 132,000 millones de pesos (mdp) y afectará especialmente a Petróleos Mexicanos (Pemex).
El monto equivale al 0.7 % del Producto Interno Bruto (PIB), y con ello se busca "hacer frente al deterioro del entorno global", dijo el secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Luis Videgaray.
El recorte al presupuesto será de 100,000 mdp para Pemex y será propuesto por el director de la petrolera a su Consejo de Administración la próxima semana.
El secretario recordó que las coberturas petroleras contratadas -que garantizan un precio mínimo del barril de crudo superior al del mercado- protegen los ingresos de este rubro al presupuesto para 2016, que aportan un tercio de los ingresos fiscales del país.
Pero no para 2017, por lo que es "recomendable realizar un ajuste preventivo al gasto que permita alcanzar las metas de consolidación fiscal establecidas" para el próximo año, destacó.
"El esfuerzo se debe focalizar en Pemex, ya que no sólo enfrenta una caída en sus ingresos -del 36.7 % interanual en los primeros once meses de 2015-, sino también debe redefinir su estrategia de negocios en el nuevo contexto de precios y bajo un nuevo marco institucional", destacó el funcionario.
El ajuste preventivo al gasto de las dependencias federales es de 32,300 mdp y se concentra en el gasto corriente. "El ajuste no afecta las áreas de seguridad ni los programas de la Secretaría de Desarrollo Social", especificó el secretario de Hacienda y Crédito Público.
El 91 % de dicho recorte corresponde a las dependencias del gobierno y el restante, 2,500 mdp, a la Comisión Federal de Electricidad.
Este ajuste, calificado de "medidas adicionales", se suma a los realizados al presupuesto ya en 2015 y se ejecutan por varios motivos, entre ellos la devaluación de la moneda, dijo Videgaray.
Por su parte, el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, dijo que el "impacto negativo" en la cotización del peso aumenta "la probabilidad de que surjan expectativas de inflación que no estén en línea con la consolidación del objetivo permanente de 3 %".
Por ello, el banco central decidió incrementar en 50 puntos base el objetivo para la tasa de interés interbancaria a un día a 3.75 %.
