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Encuentra tu éxito

Descubre cinco habilidades que te ayudarán a encontrarte con tu éxito

DANIELA SUÁREZ GÁNDARA

Muy buenos días querido lector, es para mí un gran privilegio volver a escribirte en este siguiente segmento, que estaré publicando cada martes, artículos de superación y desarrollo personal y bienestar, que te ayudarán a cómo encontrarte con tu verdadero éxito, y te guiarán a cómo tener una vida digna que deseas tener, con las que podrás resaltarla, con un toque de excelencia.

La semana pasada, en mi primer artículo, hablé cómo desarrollar el éxito, cerrando la columna con un mensaje de reflexión diciendo:

"El éxito no es algo por lo que se aprende, ni por lo que se tiene, es una habilidad que se descubre", es por eso que en este siguiente bloque vamos a continuar desarrollando nuestro éxito, descubriendo las cinco habilidades para poder encontrarnos con el verdadero éxito que tanto sueñas y que te hará convertir en una persona con espíritu de excelencia, que tú mereces tener.

Pero, ¿qué es un espíritu de excelencia? ¿Cómo puedo lograr ser excelente en todo? Primeramente, una persona con excelencia es una persona determinada, es una persona que tiene una sola fe, es una persona que tiene un buen solo estado de ánimo, que esto es lo que te ayudará a determinar el panorama de vida, tal como imaginabas tener. Por ejemplo:

¿Cuántas son las veces que perdiste una oportunidad?, no sólo una, si no muchas, y que serían las que, ni las que alcanzarías a contar. Que pudieron haberte impulsado para tu éxito pero, desafortunadamente tuviste algo que fue lo que echó todo a perder, hasta inclusive la calidad de vida, que con tanto esfuerzo lograste tener, pero déjame decirte que yo sé por qué lo echaste a perder, que fue por lo que no lograste tener, es el miedo. El miedo es como una píldora que hace que impida el paso a una nueva vida, que no te permite tener, y hace que se convierta en dudas, para paralizarte en estado de confort que sólo te ha hecho sufrir y que no deja estar en paz contigo mismo ni con los demás. La paz no es por la que el mundo reclama, si no la paz por la que te ha reclamado tu propia alma, que no has permitido dejarla descansar.

Todos nacimos para ser felices y no infelices, no nacimos para ser frustrados y si determinados; ni fracasados, pero si exitosos; ni oprimidos, pero si liberados; ni abatidos, pero si gozosos; ni presionados, pero si librados de todo mal; ni angustiados, pero si con mucha tranquilidad, ni mucho menos con insomnio, sin poder dormir durante años, pero si con un sueño en paz, hasta con enfermedades que carga tu cuerpo con las que han sido difíciles de curar o descubrir y que no has logrado terminar con todas ellas. Pero si con la sanidad que todos desean conquistar.

Es por eso que la Biblia explica que venimos a tener una vida en abundancia, pero no aún en lo material, que no es a lo que me refiero, si no es una vida rica en lo espiritual, que podrá ayudarte a como tener la paz con la que desea respirar tu alma, aprendiendo cómo vencer las luchas ante las dificultades, cómo brincar los obstáculos, cómo vencer los miedos, las dudas, las enfermedades, los rencores u odios hacia alguien o simplemente como olvidar el pasado

"El apego excesivo al pasado puede convertirte en su prisionero, a la gente que se le dificulta desprenderse de personas, sentimientos y experiencias, hechos que los hace sentirse infelices, frustradas al no tener según ellas nuevas formas de lograr lo que desean, soltar el pasado no es fácil, pero si necesario, lo que un día fue en tu vida, hoy podrá estar impidiendo tu crecimiento.

Por eso, levántate, recupera el ánimo para que puedas vencer el mal que te acecha en tu vida, ya que todavía puedes mantenerte con un espíritu de excelencia recuperando todo lo que perdiste con algo mejor, con estas cinco sencillas habilidades podrás desarrollar una vida excelente, por ejemplo, continuo recalcando:

Primero: Con las buenas actitudes, porque una aptitud no es sólo por aptitud, si no actitud. Segundo: Leer libros motivacionales o la Biblia. Tercero: Nuevamente, te recuerdo la perseverancia. Cuarto: Desarrollar la amabilidad de hablar adecuadamente, siempre declarando buenas nuevas como: tú puedes, y que lo vas a lograr, haciendo de ti una vida contractiva por tus palabras positivas, fortaleciendo tu pensamientos de manera espiritual; hablar de ti mismo con todo lo mejor que puedes decir de ti y por último, Quinto: Controlar la voz que traemos por dentro como: ¿Y si no funciona? ¿Y si me va mal? Recuerda que nadie va hacer nada por ti, sólo tú misma, sin depender de nada ni de nadie.

Cualquier duda o deseas unos consejos de manera personal, mándame tus comentarios y con gusto te atenderé.

Escríbeme a: [email protected].

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