El padre Soárez charlaba con el Cristo de la iglesia. Le preguntó:
-Señor: ¿cuál es la verdadera religión?
Respondió él:
-La única religión verdadera es el amor; el amor que se convierte en bien, en misericordia, en perdón. Si alguna religión no enseña y practica esas virtudes entonces no es inspiración de Dios, sino maligno invento de los hombres.
-Señor -dijo el padre Soárez-, conozco ateos que no creen en ti, y, sin embargo, hacen el bien a los demás.
Dijo Jesús:
-Ellos también, sin saberlo, son parte de mi iglesia. Están cerca de mí, aunque los demás piensen que están lejos. Aquel que ama, y hace el bien a su prójimo con ese amor, ha encontrado la verdadera religión.
Así dijo el Señor. Y el padre Soárez se preguntó si ya había encontrado él la religión verdadera.
¡Hasta mañana!...