La comparecencia del tesorero municipal, Enrique Mota Barragán, ante la mayoría de los regidores del Cabildo, más que una reunión de información financiera del ejercicio 2015, se convirtió en un escenario de lucha y descalificaciones entre los ediles. Cuestionaron hasta la representación ciudadana de la que algunos “se posesionan”.
Se hicieron señalamientos respecto a los rencores partidistas y a línea que se da en los posicionamientos en estas comparecencias, pues mientras que los directores generales comparecen a informar de su desempeño, algunos pasan de ser regidores a voceros de sus partidos, ya traen su guión hecho previamente y sólo se concretan a leerlo, como si lo informado no les importara, según Roberto Rodríguez Fernández del PRD.
“Cómo les duele” dijo la síndica de Vigilancia Gabriela Casale, luego de expresar en una prolongada intervención que: “es nuestra obligación señalar, hacer cuestionamientos, para eso son estas comparecencias no venimos aquí para aplaudirles a los directores o decirles lo bien que hacen su trabajo.. como si fueran los super-directores de esta administración deben saber que son observados y pueden ser señalados, ni son ocurrencias ni son necedades, a mi me parece más necedad estar aplaudiendo cuando es su obligación hacer las cosas bien”.
A la síndica prácticamente la callaron entre todos los regidores pues se pasó del tiempo y seguía hablando sin parar.
Casale le contestó así a la regidora del PRI Rosa Velia Quezada, que reconoció el trabajo del tesorero Mota Barragán y dijo que “el interés tiene pies y más que estar pidiendo información y esperar a que se la lleven deberían buscarla y dejar un rato el escritorio”. La edil expresó que una cosa son las necesidades informativas y la otra son necedades.
Ángela Campos, regidora del PAN, se sintió aludida y preguntó al tesorero “disculpe usted por mi necedad, quiero preguntarle si cambiaron los criterios de cobro para la Junta de Mejoras Materiales porque tengo reportes ciudadanos que hay modificaciones a la alza”.
El regidor del PRD expresó que “nadie puede hacer lo que le dé la gana, nadie es posesionario de la representatividad popular, el problema que tenemos es que a nosotros nos eligieron para trabajar para los ciudadanos y muchos están trabajando para sus partidos o siendo voceros de los rencores como el de Sifuentes (Raúl) que no pudo llegar, y quiero reconocer el trabajo de la Tesorería Municipal".
Fue en la parte de los posicionamientos de las fracciones del PMC, PRD, PAN y PRI donde arreciaron y se dieron “con todo” la representante del Partido Movimiento Ciudadano dijo que “la ciudadanía reprueba esta administración”.
El posicionamiento del PAN leído por Gabriela Casale fue de critica por “la falta de información financiera y administrativa completa y ocultar de manera sistemática la información, situación que afecta el erario público (...) acreditamos este posicionamiento con los resultados de la ASE de la cuenta pública del municipio del ejercicio fiscal 2014, en la cual se hicieron observaciones que no fueron solventadas en tiempo y forma. Son 122 observaciones de las que se desprenden irregularidades por casi 44 millones de pesos (...) Queda demostrado plenamente que la transparencia y la eficiencia queda únicamente en el falso discurso, la ciudadanía no merece ser engañada con verdades a medias y mentiras completas”.
Por parte del PRI , el posicionamiento estuvo a cargo del primer regidor Miguel Mery Ayup, quien ponderó la presentación de los ingresos y egresos obtenidos el año pasado y expresó: “me llama mucho la atención que al hacer criticas al hablar de tener el pulso de la ciudadanía el PRI tiene el pulso con datos duros de la ciudadanía, gracias a ellos tuvimos más ingreso en el Predial, gracias a ellos pudimos tener la confianza de ponerles alumbrado nuevo afuera de sus casas y tenemos una explosión de obras en distintos puntos de la ciudad, se critica la nómina (...) que la tenemos en 700 millones anuales y Saltillo la tiene en 900, son inútiles los de Saltillo, es una administración inútil la de Saltillo porque sobrepasa los límites para ejercer una administración con eficiencia y eficacia, ahí están las pruebas y en Saltillo no se hizo una Jabonera, tampoco una Línea Verde, ni una Compresora, tampoco un Metroparque ni 300 millones en pavimento y mucho menos se proyecta un teleférico ni se tienen ingresos por fotomultas, aquí hay una política de reciprocidad de ciudadanos con su gobierno, por eso, sí sirven estas comparecencias (...) por eso el partido que tiene la mayoría en el Cabildo respalda y refrenda el apoyo a la Tesorería Municipal”.
Se convirtió en un escenario de lucha y descalificaciones entre los ediles. (FERNANDO COMPEÁN)
