Abbott ordenó extender el despliegue de tropas de la Guardia Nacional en lugares estratégicos de la frontera para reducir los cruces ilegales. (ARCHIVO)
El gobernador de Texas, Greg Abbott, ordenó extender el despliegue de la Guardia Nacional en la frontera sur de Estados Unidos, ante el reciente aumento de menores no acompañados que están cruzando hacia territorio estadounidense.
"Texas no va a cruzarse de brazos frente a este desafío", dijo Abbott. "No vamos a ser víctimas como estado de la respuesta apática del gobierno federal para la seguridad fronteriza", indicó.
Texas colinda con el estado de Coahuila en México.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EU reportó la víspera que unos 10 mil 588 menores migrantes no acompañados cruzaron la frontera para ingresar a Estados Unidos, en los últimos dos meses procedentes de países centroamericanos.
Para responder al incremento de migrantes, Abbott ordenó extender el despliegue de tropas de la Guardia Nacional en lugares estratégicos de la frontera para reducir los cruces ilegales.
El gobernador también ordenó al Departamento de Seguridad Pública de Texas coordinarse con el Departamento de Parques y Vida Silvestre de la entidad, para aumentar el número de lanchas patrulleras en sitios estratégicos a lo largo del Río Grande (Río Bravo).
Abbott recordó que en septiembre advirtió al secretario de Seguridad Nacional, Jeh Johnson, "sobre el significativo aumento de menores no acompañados que cruzan a través de nuestra frontera. A pesar de la advertencia, mi solicitud de más agentes de la Patrulla Fronteriza y de recursos estratégicos para asegurar la frontera fueron ignorados", señaló. "Ahora, la preocupación acerca de lo que advertí, se ha convertido en realidad", dijo.
Entre el 1 de octubre y el 30 de noviembre, agentes de la Patrulla Fronteriza detuvieron a lo largo de toda la frontera con México a un total de 10 mil 588 menores inmigrantes no acompañados.
La gran mayoría de las detenciones (seis mil 465) se registró en el Río Grande de la Patrulla Fronteriza, en el valle sur de Texas.
Ante tal decisión, el Gobierno de México lamentó el despliegue en la frontera de miembros de su Guardia Nacional. La Secretaría de Relaciones Exteriores indicó que México mantendrá un diálogo "franco y directo con el Gobierno de Estados Unidos y con el estado de Texas, desde una perspectiva integral que permita consolidar una frontera segura y competitiva que promueva prosperidad en ambos países".
