El Simas debe dar respuesta transparente a la ciudadanía que demanda las pruebas de la calidad del agua que señalan, debido a que por décadas la presencia de arsénico fue negado por las autoridades, dice el investigador Gonzalo García.
Esto luego de que colonos de Senderos y Ampliación Senderos denunciaran que un estudio de análisis de agua arrojara .105 mg/l de arsénico, cuando la norma es de .025 mg/l.
"Por mucho tiempo la autoridad estuvo negando los problemas de arsénico, y mientras los Consejos no sean realmente ciudadanos, la gente puede tener sus dudas y decir, 'no confío en los procedimientos que se están haciendo', esto es muy válido".
El científico que ha investigado ampliamente el tema en la región y otras partes del país, dice que el ciudadano puede demandar nuevos estudios y establecer las condiciones junto con el Simas o Conagua en un ejercicio de transparencia.
"En teoría el ciudadano paga sus impuestos, en teoría el ciudadano puede decir 'no quiero que los estudios los haga la autoridad' porque no confía y en un momento dado que la autoridad asuma el costo, porque los ciudadanos pueden aducir que la cuestión de la contaminación por arsénico estuvo manejado muy poco transparente y ellos quieren que, por ejemplo, Conagua o Simas sea el que pague los estudios en un laboratorio acreditado que no sea de ellos".
Esto debido a que en La Laguna no hay laboratorios particulares acreditados en el proceso de análisis de arsénico en el agua y la ciudadanía está en su derecho de solicitarlos a los organismos acreditados para contrastarlos con los publicados por la autoridad. Comenta que para hacer esto es fundamental que ambas partes se sienten a dialogar para hacer la sistematización del proceso y qué organismo de la sociedad civil y la academia pudieran intervenir también para darle mayor certeza.
En países europeos, señala, este ejercicio se realiza desde décadas atrás a petición de la ciudadanía.
"Nosotros apenas estamos empezando a generar la demanda y la organización ciudadana, en Europa muchos de estos pleitos se dieron en los 60's los 70's, no necesariamente por el agua, la gente 'decía no creo' y en EU igual, las autoridades han tenido que ceder y muchos sistemas de atención están no nada más observados, sino controlados por ciudadanos".
Con respecto a las acreditaciones, señala que el proceso es costoso y si muchos laboratorios no se someten, no significa que no tenga la calidad o que los resultados sean incorrectos, sin embargo, aclara que la acreditación es un respaldo para cuando se inicie una disputa legal.
Polémica. Vecinos de Senderos denuncian la presencia de arsénico en el agua, Simas niega la contaminación. (EL SIGLO DE TORREÓN)
