La escritora anunció su regreso al género que la ubicó como un referente de las letras fantásticas en todo el mundo. (Archivo)
Tras la publicación de Los cuentos de Beedle el Bardo, la última novela juvenil de J.K. Rowling que en diciembre de 2008 llegó a los estantes de librerías británicas, y luego de tres obras para adultos la escritora anunció su regreso al género que la ubicó como un referente de las letras fantásticas en todo el mundo.
En una entrevista para la estación Radio 2, Rowling reveló que ya se encuentra inmersa en un nuevo libro infantil, aunque no deja a un lado los compromisos que ya tiene con la expansión del universo de Harry Potter, como los son una obra de teatro y el guión cinematográfico para un spin-off del famoso mago.
“Tengo una idea en un libro para niños. De hecho, he escrito una parte que me encanta, así que voy a terminarla. Habrá otro libro para niños”, afirmó la británica en entrevista con el locutor Simon Mayo, aunque no quiso adelantar una fecha de publicación debido a la alta carga de trabajo con la que cuenta a la par de este proyecto.
Rowling, de 50 años, reconoció en la emisión radial que “a veces tengo miedo de morir antes de haber escrito todo lo que tengo en mente”. Incluso reconoció que son tantos los proyectos que contempla que muchos de sus ellos “acaban pasando 19 años después”.
Entre 2012 y 2014 la nacida en Yate, Suoth Gloucestershire, publicó una obra por año. Una vacante imprevista (2012) fue la primera novela escrita por J.K. Rowling para el lector adulto, aunque no tuvo una recepción cálida al unísono por parte de la crítica. Luego, bajo el seudónimo de Robert Galbraith, publicó las obras policiacas El canto del cuco (2013) y El gusano de seda (2014).
