El Cártel de Jalisco amenaza a México
La DEA continúa identificando ocho cárteles grandes que operan actualmente en México: Sinaloa, Cártel de Jalisco Nueva Generación, Organización Beltrán Leyva (BLO), Los Zetas, Golfo, Juárez / La Línea, La Familia Michoacana (LFM), y Los Caballeros Templarios (Caballeros Templarios o LCT);
Sin embargo, las pérdidas de liderazgo para LFM y LCT en el último año han degradado considerablemente su capacidad de operar y su cohesión organizacional. El gráfico adjunto muestra las fluctuaciones en las áreas de dominio y control de las principales organizaciones narcotraficantes de México, sobre todo la expansión significativa de CJNG.
Desde su bastión en Jalisco la influencia de la organización se extiende a Nayarit, Colima, Guerrero, Veracruz, Michoacán y otros estados mexicanos.
La presentación de informes de la DEA indica que la organización ha ampliado recientemente su dominio de los estados de Guanajuato y San Luis Potosí, además de una mayor presencia a lo largo de los estados de la costa mexicana del sur de Oaxaca y Chiapas.
El CJNG utiliza sus alianzas y explota las debilidades de los cárteles rivales para hacerse cargo de nuevos territorios o aumentar su presencia en las zonas ya bajo control.
La desintegración de LCT en 2015, allanó el camino para que el CJNG floreciera y ampliara su presencia territorial en Michoacán. Las luchas internas por el poder y el desorden sufrido por los cártel del Golfo y Los Zetas son también propensos contribuyendo a la expansión CJNG. Con territorio adicional y otros por alcanzar, el CJNG se encuentra en una posición privilegiada para aumentar su operaciones de tráfico de drogas, la riqueza y su influencia en México.
