Guillaume Gillet, jugador del Bastia francés. (EFE)
Las autoridades futbolísticas de Francia decidieron ayer el descenso administrativo del Bastia a la Ligue-2 -segunda división-, por falta de garantías financieras.
La Dirección Nacional de Control de la Gestión (DNCG), organismo independiente vinculado a la Liga de Futbol Profesional, consideró que el Bastia necesita al menos 1.3 millones de euros para asegurar su presencia en la máxima categoría.
En un comunicado difundido a través de Twitter, el club corso anunció que apelará "frente a esta decisión de un extrema severidad", ya que, según asegura, la venta de su jugador Ryad Boudebouz al Montpellier por 1,7 millones de euros ha subsanado ese problema contable.