El gobernador dijo que los policías federales actuaron 'con absoluta pulcritud' apegados a los protocolos nacionales e internacionales para el repliegue de personas. (EFE)
El gobernador interino de Guerrero, Rogelio Ortega Martínez, justificó el desalojo de ayer martes en Acapulco y dijo que los policías federales actuaron "con absoluta pulcritud" apegados a los protocolos nacionales e internacionales para el repliegue de personas.
Entrevistado vía telefónica, dijo que no tiene reporte de ningún muerto, pero sí de 12 policías federales lesionados "lamentables los hechos de ayer. Nosotros advertimos que nuestra tolerancia tiene límites para contener acciones de radicalidad extrema".
De acuerdo con la versión del mandatario de Guerrero, un autobús lanzado por los manifestantes detonó el problema, lo cual consideró una "acción de radicalidad extrema".
"(Los manifestantes) intentaron tomar el aeropuerto en su desesperación y radicalización extrema lanzaron un autobús lesionando a más de 12 policías federales, esto fue lo que detonó para que se actuara que impidiendo que irrumpieran en el Mex tenis (Abierto Mexicano de Tenis donde hubo una gresca entre taxistas y maestros que intentaron irrumpir al evento privado".
Dijo que tiene absoluta coordinación con la federación para darle salida al problema que se da en un contexto de crisis política social en Guerrero. "No hay ningún muerto, se le brinda atención a los heridos".
Señaló que los policías actuaron con "absoluta pulcritud, conteniendo que irrumpieran de manera violenta, cuando de manera beligerante intentaron irrumpir en el Mex tenis, ni siquiera fuimos nosotros los que contuvimos, fueron los taxistas, los trabajadores, porque atenta contra la imagen de Acapulco".
