Deuda. El primer ministro griego Alex Tsipras ha tenido unas negociaciones complicadas. (EFE)
Alemania rechazó ayer jueves una propuesta conciliatoria de Grecia sobre el préstamo de rescate financiero. La reacción amainó las esperanzas de que las conversaciones de emergencia logren superar un estancamiento que amenaza a Atenas con la cesación de pagos y el retiro del euro.
El gobierno de Atenas pidió extender el acuerdo del rescate en seis meses para dar tiempo a todas las partes a elaborar un trato más permanente. Pero se negó a prometer la continuidad de una serie de recortes presupuestarios y reformas exigidos por la eurozona en 2010 a cambio de préstamos, a los que Grecia atribuye el derrumbe de su economía.
Alemania se apresuró a responder que el plan era insuficiente. El vocero del Ministerio de Finanzas alemán, Martin Jaeger, dijo que "no es una propuesta sustancial para una solución".
Agregó que equivale a un pedido "de financiación puente sin cumplir los requisitos del programa", específicamente las medidas presupuestarias. Agregó que no se corresponde con lo que los países de la eurozona habían exigido a Grecia antes que las conversaciones se interrumpieran el lunes. El primer ministro Alexis Tsipras mantuvo una conversación telefónica de 50 minutos con Ángela Merkel y tuvo un clima positivo.