Respeto. La policía evitó mayores desmanes y, aunque existieron conatos, no hubo agresiones.
Personal administrativo desalojó el Congreso de Guerrero para evitar confrontaciones con los manifestantes que ayer por la mañana iniciaron una marcha en Chilpancingo.
Lo anterior luego que los inconformes exigieran a los trabajadores que salieran del inmueble.
Dijeron que no entrarían, pero que tampoco se moverían de la sede legislativa hasta que salieran todos los empleados.
En tanto, elementos antimotines se apostaron en el interior del Congreso estatal, alertas en caso de que fuera necesaria su intervención.
Ante la insistencia de los manifestantes de que el personal tenía que abandonar el recinto, los trabajadores administrativos salieron.
INTENTAN QUEMAR PROPAGANDA
Los inconformes también retiraron propaganda electoral y la intentaron quemar en la puerta de entrada al estacionamiento.
Ante ello, un trabajador salió con una manguera y arrojó un chorro de agua al grupo de encapuchados que quitó la propaganda, apagando así el fuego iniciado en las mantas.
Molestos, algunos de los encapuchados arremetieron usando resorteras.
Tras el hecho, la marcha se retiró del Congreso y comenzó a circular por la lateral del bulevar Vicente de Guerrero, con dirección al Palacio de Gobierno.
TAMBIÉN EN EDUCACIÓN
Durante la marcha que realizan en Chilpancingo, miembros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) y del Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado (SUSPEG) desalojaron al personal de las instalaciones de la Subsecretaría de Educación Básica.
Además, los manifestantes advirtieron que quemarían el sitio si ven a los empleados laborando en el interior del edificio.
Los maestros y el personal administrativo del SUSPEG iniciaron la marcha para exigir el reconocimiento de su fuente de trabajo y las plazas.
"Aquí estamos los maestros que han decidido salir para exigir al gobierno federal y estatal se nos reconozca; no nos vamos a quedar con los brazos cruzados", mencionaron los docentes.
Los inconformes salieron del monumento conocido como "Estela de luz" para exigir a las autoridades correspondientes el reconocimiento de sus plazas.
Son procedentes de las regiones Centro, Acapulco, Tierra Caliente, Costa Grande, Costa Chica y La Montaña.
