La decisión se produjo un día después de que el líder de la cámara baja, el republicano John Boehner, anunció la invitación a Netanyahu sin notificar antes a la Casa Blanca. (ARCHIVO)
La proximidad de los comicios en Israel será un impedimiento para que el presidente Barack Obama reciba al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, cuando visite la capital estadounidense para pronunciar un discurso ante el Congreso.
La decisión se produjo un día después de que el líder de la cámara baja, el republicano John Boehner, anunció la invitación a Netanyahu sin notificar antes a la Casa Blanca, como ha sido el protocolo hasta ahora, lo que fue interpretado como un desdén al mandatario.
La presencia de Netanyahu en el Congreso será la respuesta de los republicanos a la amenaza de veto que Obama lanzó el pasado martes en su Mensaje sobre el Estado de la Unión, si el Legislativo aprueba nuevas sanciones contra Irán.
Bernadette Meehan, vocera del Consejo Nacional de Seguridad (NSC), explicó que la decisión del mandatario obedeció a razones de principios, haciendo notar que la presencia de Natanyahu tendría lugar en la víspera de elecciones legislativas en Israel.
“No recibir a jefes de Estado o candidatos teniendo cerca sus elecciones es una práctica y principio de larga data, a fin de evitar las apariencias de influencia sobre una elección democrática en un país”, señaló la portavoz.
La visita de Netanyahu está prevista para el 19 de febrero próximo, dos semanas antes de las elecciones parlamentarias en Israel, por lo que Meehan afirmó que, con base en esa práctica, “el presidente no se reunirá con el primer ministro Netanyahu” dada la proximidad de los comicios.
La oposición de Obama a nuevas sanciones responde a sus temores de que las negociaciones para un acuerdo nuclear entre Irán y el grupo 5+1, que integran los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania, pudieran descarrilarse.
La vocera dijo que Obama ha sido claro en su oposición al accionar del Congreso ante ese potencial escenario, además de considerar que la imposición de sanciones adicionales a Irán podría generar divisiones en la comunidad internacional.
“El presidente ha tenido muchas conversaciones con el primer ministro (israelí) sobre este asunto, y estoy segura de que ellos continuarán en contacto en éste y otros temas de importancia”, apuntó.
