Aficionados aztecas se dejan sentir en Chiapas para recibir al Tri. (NOTIMEX)
Faltan poco menos de una hora para que comience el juego entre la Selección Mexicana y Honduras.
Duelo amistoso, "que no tiene nada como tal", dijo Miguel Herrera, técnico nacional, quien aclaró durante la semana que poco "se tiene que ganar, y mucho que perder".
Esto lo tomó a mal el entrenador de Honduras, Hernán Medford, que como jugador fue uno delos verdugos del primer aztecazo de la historia, en el 2002, cuando Costa Rica venció al Tri en la cancha del estadio Azteca.
"Para el Piojo no existimos", dijo Medford. "Es una falta de respeto que hable así de nosotros, pero nosotros sí respetamos a México".
Al final se calentó el juego, un juego que no necesita ser calentado, ya que históricamente los centroamericanos se juegan la vida contra la Selección Mexicana.
A Honduras no se le pudo ganar en el pasado hexagonal final de la eliminatoria rumbo a Brasil 2014. Primero se empató a dos goles en San Pedro Sula, y se perdió 2-1 en casa, lo que marcó la salida de José Manuel de la Torre, hoy técnico e Chivas.
El “Víctor Manuel Reyna” se llena poco a poco. Estadio pintado totalmente de verde viste sus mejores galas para recibir al equipo nacional.
La última vez que el Tri vino fue en el 2008, cuando Cuauhtémoc Blanco se despidió de la Selección, por diferencias con el entonces técnico Sven Goran Eriksson, el sueco del que pocos quieren acordarse.
Por las calles aledañas ya no se puede pasar. Los pasillos están llenos. Comercialmente es un éxito la visita, aunque los organizadores digan que saldrán a mano, entre la venta de boletos y los patrocinios.
Ambos equipos ya arribaron al estadio. El Tri como siempre fue vitoreado, a los hondureños poco o nada les hicieron caso.
Hay un ambiente cálido, aunque no el calor tan temido que hay en esta zona del país. El juego se llevará a cabo sin problemas, más de los que se puedan ver en la cancha.
Seguramente habrá patadas, así lo teme el “Piojo”. Medford asegura que no va a ser así.
Se viene el México-Honduras. Con poco que ganar pero mucho que perder.
Pero nadie quiere una derrota.
